Lorenzo intentará mantener la pugna hasta la última carrera, que será en casa
05 oct 2009 . Actualizado a las 02:00 h.La victoria de Jorge Lorenzo en Portugal y el cuarto puesto de Valentino Rossi ha hecho que los treinta puntos de ventaja con los que el italiano llegó a Estoril se queden reducidos a solo 18.
Quedan por disputar tres grandes premios, 75 puntos en juego y matemáticamente todo es posible todavía. Lorenzo ha cumplido en Portugal su papel y ha salido a atacar. Sabe que para soñar con el título tiene que ganar en Australia y Malasia y llegar todavía con opciones a Valencia, que cierra el calendario mundialista. El mallorquín se siente capaz, aunque nadie haya sido capaz de remontar tanta ventaja a Valentino Rossi.
Seguir la estela
Desde el otro lado, Valentino se las prometía muy felices pues sabía que con 30 puntos a su favor solo tendría que seguir la estela de su compañero de equipo para mantener un margen suficiente en Valencia.
Pero las tornas han cambiado y la fulgurante reaparición de Stoner en Estoril y la regularidad de Dani Pedrosa puede convertir a estos dos pilotos en árbitros del Mundial. De momento, en Portugal han hecho el trabajo perfecto para Lorenzo, restándole puntos al italiano. Si se repitiese esta clasificación en Australia y Malasia, Lorenzo podría llegar líder ya a Valencia.
Cambio de estrategia
Esto hace que Rossi tenga que cambiar sus planes en los tres grandes premios que quedan y salir a atacar a Lorenzo. Es algo mucho más arriesgado que la estrategia conservadora prevista y eso al italiano le incomoda. Además, él mismo ha reconocido que su compañero de equipo es el rival más duro y correoso que ha tenido nunca. En Australia veremos a un Rossi muy motivado.
Pero la cotización de Lorenzo tras su victoria ayer ha subido muchos enteros. El relevo generacional que pude suponer un título mundial del teóricamente segundo piloto en Yamaha puede adelantar acontecimientos y el rumor de un posible acercamiento de Rossi a Ducati cobra vida de nuevo. Por lo de pronto, en el equipo oficial de Yamaha, a lo largo de este año, el estatus del español ha ido cambiando. Cada vez se le tiene más en cuenta, se le hace más caso e incluso se atienden sus peticiones técnicas, incluso cuando son diferentes a las de Valentino.
En cuanto a los escenarios que quedan, Australia y Malasia son igual de propicios para ambos, que saben ya lo que es ganar allí. Es cierto que a Valentino le gustan más que Estoril o Valencia, donde siempre se ha mostrado muy incómodo. Precisamente, el circuito valenciano es otra de las ventajas de Lorenzo. Sabe que jugarse allí el título en una última carrera le dará ventaja, con un público entregado a su favor. Esa puede ser su última baza.
Desde que Alex Crivillé arrebatara el título mundial a Mick Doohan, ningún otro piloto español ha estado tan cerca de ganar en la categoría reina. Jorge Lorenzo tiene una oportunidad que se jugará a tres partidas. La primera, el 18 de septiembre en Philip Island.