Entra en servicio la esperada pasarela peatonal sobre el Miño en San Lázaro

Enrique Gómez Souto
enrique g. souto LUGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

Permitirá a los usuarios del Club Fluvial dejar sus coches en el entorno de la fábrica de la luz

10 feb 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

La pasarela peatonal sobre el Miño, en San Lázaro, entró ayer en servicio. La inauguración reunió a un considerable número de autoridades, pero también a numerosos vecinos que no quisieron perderse el esperado momento. El alcalde, José López Orozco, pidió al párroco de San Lázaro que bendijese la pasarela, «porque iso nos vai dar seguridade», aunque no dudó de la calidad del trabajo realizado por los técnicos.

El presidente de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil, Francisco Fernández Liñares, explicó que esta obra tuvo un retraso involuntario, como consecuencia de los problemas económicos que sufrió la primera adjudicataria. Fue necesario rescindir el contrato y convocar una nueva licitación. La pasarela costó 1,5 millones y el proyecto global del que forma parte (acondicionamiento de la margen derecha del Miño entre Lugo y Ombreiro), 4,76 millones.

Algunos vecinos de San Lázaro apuntaron ayer el papel que jugó el ex presidente de la Diputación, Francisco Cacharro Pardo, en la construcción de la pasarela peatonal, que él pretendía situar cerca de Los Robles. A este cambio de ubicación aludió también Fernández Liñares. «Aquí presta mellor servizo», declaró en alusión a que permite que los usuarios del Club Fluvial puedan aparcar sus coches en el entorno de la antigua fábrica de la luz.

El subdelegado del Gobierno, José Vázquez Portomeñe, señaló que la nueva infraestructura añade atractivo a una zona ya de por sí atractiva. El presidente de la Diputación, Gómez Besteiro, aludió al incremento del número de puentes en Lugo: la pasarela, el que está en construcción a la altura del Parque do Miño y el de la autovía de Santiago.

El alcalde, José López Orozco, dijo que la pasarela sirve para unir más a los vecinos de Lugo, y que facilitará el acceso a los usuarios del Club Fluvial. Por indicación suya, el párroco de San Lázaro, Ramón Díaz, que asistía al acto, bendijo la obra.