Sangría y sidra chantadinas en Shanghái

LEMOS

Hijos de Rivera venderá en la exposición universal de este año productos elaborados por Customdrinks

23 mar 2010 . Actualizado a las 15:29 h.

La fábrica chantadina Customdrinks elabora ya siete productos diferentes para Hijos de Rivera, su empresa matriz. El séptimo lo presentó la firma cervecera ayer en Barcelona, en la jornada inaugural de la feria internacional Alimentaria. Se trata de una sidra seca, hecha al gusto irlandés, con menos azúcar y para consumir con hielo. Otras bebidas hechas en Chantada, como la sangría o el vino en lata, estarán a la venta en el pabellón oficial de España en la exposición universal de Shanghái, que abrirá en mayo. La fábrica trabaja en la actualidad prácticamente al 100% de su capacidad a la espera de que empiece la esperada ampliación del polígono industrial de Os Acivros, en la que ya tiene reservados 20.000 metros cuadrados más para sus nuevas instalaciones.

Antes de su salida al mercado con la marca Maeloc , esta sidra seca pasó por un artesanal estudio de mercado en Chantada. «La probamos en su momento en algunos establecimientos de la localidad para comprobar qué le parecía a la gente», explica el director de Customdrinks, Luis Espiñeira. Por ahora, es prematuro adelantar qué cantidad de sidra con este formato se producirá anualmente en Chantada. Sí está claro que este producto se ha sumado ya a la lista de bebidas que Hijos de Rivera elabora en lo que en la empresa llaman su «plataforma de innovación» de Chantada.

Una vez confirmada la continuidad de esa plataforma en su ubicación actual, después de descartada la marcha a Monterroso, la empresa espera ahora a que empiece de una vez la prometida ampliación del polígono industrial de Os Acivros. Necesitan los 20.000 metros cuadrados que han reservado en el nuevo suelo industrial para aliviar la saturación de su planta actual, que ocupa algo menos de 6.000 metros cuadrados en los que ya no queda espacio para nada más. «Estamos deseando ampliar, antes de nada para trabajar más cómodos que ahora», asegura Espiñeira.

La falta de espacio

Según los responsables de la fábrica, la falta de suelo es un problema fundamentalmente para trabajar con nuevos formatos de envase, pero no tanto para desarrollar productos distintos. De hecho, ya están preparando alguno más para presentarlo durante los próximos meses, sobre el que todavía no quieren adelantar nada. Pero mientras no puedan ampliar la fábrica, «tampoco podremos meter más máquinas para trabajar más formatos».

Por el momento, la progresiva diversificación de la producción no supondrá más ampliaciones de plantilla en Chantada. En la actualidad, en las instalaciones de Customdrinks trabajan un total de veintisiete personas. Los responsables de la fábrica no descartan ampliaciones, pero no ahora, sino a medio plazo. «De momento -dice el director-, vamos a ver cómo evolucionan las ventas».