El exceso de publicidad en las televisiones es un hecho conocido y repetido cada año. El Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, ha vuelto a incidir sobre este aspecto en su informe anual del 2008, donde denuncia el «incumplimiento reiterado» por parte de las cadenas televisivas de la normativa sobre esta materia.
El Defensor del Pueblo constata en su análisis que no solo hay un elevado número de anuncios, sino que, en muchos casos, no se identifican como tales y existe publicidad encubierta de las cadenas. Del seguimiento realizado el pasado año se desprende que «los operadores apuran hasta el límite legal sus emisiones de publicidad». El Defensor del Pueblo cuestiona que los límites establecidos por la actual legislación sean los idóneos. «Supone autorizar un nivel de saturación publicitaria que posiblemente sea lesivo para los intereses de los anunciantes y los propios derechos de los espectadores», detalla en su informe.
Esta institución y la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones mantienen visiones distintas sobre el tema. Para el Gobierno no se estaba produciendo un incumplimiento sistemático de la normativa, como denuncia el Defensor del Pueblo, aunque reconoce que se habían detectado «infracciones», que eran sistemáticamente sancionadas.
Múgica recuerda que desde el sector de los anunciantes se ha pedido que se limite el tiempo dedicado a publicidad, por todos los conceptos, a doce minutos por cada hora y no se permita rebasarlo mediante la autopromoción. Recuerda que la actual normativa es mucho más flexible y permite cinco minutos adicionales de otras formas de publicidad, e incluso la emisión de programas de televenta de, al menos, quince minutos, lo que puede llegar a sumar en total 32 minutos de emisiones comerciales en una hora natural. «Todo ello sin considerar que los numerosos anuncios de promoción de la propia programación de las cadenas y los menos frecuentes de carácter gratuito de servicio público o de carácter benéfico, no son computados dentro del tiempo reservado a la publicidad y no están sometidos a ningún tipo de restricción», explica en el documento.
El Defensor del Pueblo también se refiriere en su memoria a las quejas que ha recibido sobre los problemas de sintonización de la TDT en distintas localidades y el requerimiento de abonos de televisión de pago a través de empresas de recobro.