De la Vega da por hecho que el bloqueo de Cuba a las empresas gallegas se solucionará

La Voz

GALICIA

Asegura que el diálogo con las autoridades de La Habana es fluido

28 nov 2009 . Actualizado a las 03:22 h.

El Gobierno español da por hecho que solucionará el corralito al que están siendo sometidas en Cuba las casi 300 empresas españolas que operan en el país caribeño, entre ellas, unas quince gallegas. Así lo aseguró ayer la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, al término del Consejo de Ministros. De la Vega insistió en que el Ejecutivo central está trabajando activamente en este asunto: «El diálogo con las autoridades cubanas es fluido y las empresas tienen todo nuestro apoyo; pueden estar seguras de que lo solucionaremos».

La vicepresidenta eludió precisar las medidas en las que estaría trabajando el Ministerio de Asuntos Exteriores, que desde hace un tiempo mantiene contactos con el Ejecutivo de La Habana para tratar de poner fin a un problema que atenaza a numerosas pequeñas y medianas empresas españolas y gallegas. El Banco Financiero Internacional tiene bloqueados en estos momentos cerca de 400 millones de dólares (unos 266 millones de euros) propiedad de compañías españolas. El corralito tiene su origen en el delicado escenario financiero que atraviesa el país, que ha dejado las arcas públicas sin liquidez, de ahí los obstáculos de las firmas para transferir su dinero a sus países de origen, en este caso España.

La tensión entre las empresas españolas y las autoridades cubanas ha subido de intensidad en las últimas semanas, pero el mutismo de las primeras es total para evitar represalias por parte del Ejecutivo cubano. Consultada sobre esta polémica, la embajada del país caribeño en España eludió pronunciarse ayer, un mutismo similar al que ha guardado el Ejecutivo de La Habana en todo momento.

El único pronunciamiento oficial tuvo lugar hace unos días, cuando el ministro cubano de Comercio Exterior, Rodrigo Malmierca, reconoció que su Gabinete se había visto obligado a adoptar «medidas restrictivas», aunque matizó que tienen carácter coyuntural.

De esta provisionalidad están también convencidos en el Ministerio de Asuntos Exteriores español, que sostiene que el bloqueo de las cuentas obedece a una situación puntual de falta de liquidez a causa de la crisis económica y no a una medida de represalia contra las empresas españolas.

El complejo escenario financiero que atraviesa Cuba se complicó el año pasado, cuando tres huracanes asolaron el país y provocaron daños por valor de 10.000 millones de dólares. La subida del petróleo y los alimentos (que el país caribeño importa en cantidades multimillonarias) y la caída del precio del níquel -su principal exportación- en los mercados internacionales han agravado además la situación hasta recortar de forma notable la liquidez de las entidades financieras cubanas, todas de carácter público y por las que pasan necesariamente los fondos de las empresas que operan en el país.