La supresión de la actividad extraordinaria por las tardes en los hospitales públicos gallegos ha provocado las críticas de la oposición y de los sindicatos. La CIG-Saúde ha reclamando a la conselleira de Sanidade, Pilar Farjas, que convoque de forma urgente la mesa sectorial para abordar «con seriedade e rigor» el programa de trabajo de tarde en los centros sanitarios.
La decisión tomada de modo unilateral por Sanidade es calificada por el sindicato de preocupante «pola repercusión asistencial que ten e o efecto negativo sobre a poboación». María Xosé Abuín, secretaria xeral de CIG-Saúde, cuestiona cuál va a ser la solución que la Xunta dé a más de un 20% de la actividad sanitaria, que se realiza por las tardes. «Non é aceptable que a solución pase por seguir engrosando as listas de espera, ou ben fomentando a concertación con centros privados», dice.
Otros sindicatos coinciden de hecho en que esta medida anunciada por Sanidade puede incrementar los conciertos con las clínicas privadas, mientras que los socialistas denunciaron que la paralización de la actividad vespertina provoca un incremento de las demoras en las cirugías, algunas de ellas tan preocupantes como las oncológicas.
En el 2008, el anterior Gobierno aprobó en la mesa sectorial de sanidad un documento para redefinir el llamado complemento específico, en el que se recogía un compromiso expreso para fomentar la dedicación exclusiva al servicio público de los profesionales a través del diálogo, un diálogo que según la CIG ha sido hasta ahora «inexistente».
Acabar con las peonadas
La decisión de la consellería parte del informe del Consello de Contas en el que se pone de manifiesto la desviación de actividad ordinaria de mañana a la extraordinaria -las llamadas peonadas, que se pagan a mayores-, y de que el mayor aumento de esta actividad no se traduce en una mejora de las listas de espera.
La CIG-Saúde, en este caso, coincide con el Consello de Contas en criticar las peonadas, al considerar que deben ser sustituidas por trabajo estructural en el turno de tarde. «Pero non podemos admitir que se elimine toda a actividade en quenda de tarde sen ter unha alternativa real implantada no sistema sanitario público», concluye Abuín.
Sanidade no aclaró si la medida es definitiva, y la enmarca en un plan de reordenación para mejorar la coordinación entre atención primaria, urgencias y atención especializada.