En este nuevo golpe al narcotráfico internacional se ha abortado la entrada en Galicia de casi seis toneladas de droga, siendo esta una de las mayores aprehensiones en cantidad de los últimos años. No obstante, esta nueva actuación conjunta de las fuerzas de seguridad de los dos países se enmarca en una operación mayor que se vendría desarrollando desde hace meses. De hecho, el operativo policial habría comenzado en España en el mes de mayo del 2007. En el marco de este dispositivo policial antidroga se englobaría la detención de otras cuatro personas el año pasado en Alicante y ocho más en Almería, donde se interceptó otro alijo que, presuntamente, también tendría como destino final la comunidad gallega. En estas dos intervenciones de la policía se aprehendieron otros 2.300 kilos de hachís. Fluidez En declaraciones a Efe, el jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Pontevedra, Rafael Daza, destacó que la «fluidez de la cooperación» con la Policía Judicial portuguesa permitió el desmantelamiento de esta banda que introducía la droga en Galicia, una comunidad considerada por los investigadores como «punto intermedio» para vender el hachís en el resto de la Península y Europa. En otra operación conjunta desarrollada en septiembre del año pasado en Portugal fueron detenidos seis gallegos con un alijo de 3,2 toneladas de hachís.