El club ferrolano descarta por ahora dirigir un escrito a Victoriano Sánchez Arminio
20 nov 2007 . Actualizado a las 02:28 h.El Racing vuelve a sentirse maltratado por los árbitros. La mecha de la polémica la avivó el sábado el histriónico Alfonso Pino Zamorano: regaló un penalti al Málaga con 0-2, expulsó a los suplentes Manolo y Javi Rodríguez, no vio fuera de juego en el 3-2 y el partido terminó con 4-2 y el líder ovacionado por su gente. En el túnel de vestuarios, el árbitro amonestó al capitán verde, Jonathan Martín, al que anunció su expulsión por su segunda tarjeta. En el acta rectificó pues no le había mostrado antes amarilla alguna.
En total, el Racing se ha quejado de errores en seis partidos de esta temporada en los que se le escaparon puntos que le situarían en la zona de ascenso.
Decimoquinto clasificado, con cuatro puntos de margen sobre la zona de descenso, el consejo de administración opta de momento por la prudencia. En su anterior etapa en Segunda, en marzo del año 2005, envió una carta al responsable del Comité Técnico de Árbitros, Victoriano Sánchez Arminio. En el texto, amenazaba con acudir a los juzgados si el equipo sufría más «robos». Un esperpéntico arbitraje de Pedro Martínez Franco en A Malata encolerizó al racinguismo.
Desde el Racing se llegó a pedir un control de alcoholemia para el colegiado murciano. El año pasado, ya como uno de los equipos grandes de Segunda B, siguió sintiéndose maltratado, con 25 expulsiones. ¿A qué se debe la supuesta mala suerte con los colegiados? Hay quien piensa que al club le perjudicó que uno de sus vicepresidentes, Pepe Criado, se vinculase a la oposición a las federaciones gallega y española, de las que depende el estamento arbitral. Aunque, el Racing también mantiene exquisita relación con Evaristo Puentes Leira, miembro del comité de designaciones, al que Silveira impuso hace semanas la insignia de oro del club verde.