La canciller alemana comprobará en España el cumplimiento de los deberes anticrisis
30 ene 2011 . Actualizado a las 06:00 h.La primera vez que Rodríguez Zapatero se reunió con Angela Merkel en Berlín, en abril del 2006, llegó con un interesado regalo bajo el brazo. Habían transcurrido cinco meses del acceso al poder de la nueva canciller y al jefe del Gobierno español aún le ardía la lengua por una frase que nunca debió pronunciar: «Es una política fracasada», señaló al comentar el resultado de las elecciones germanas de septiembre del 2005, en las que la dirigente democristiana venció con muchos más apuros de los previstos.
Para remediar y enterrar su poco afortunado comentario, en aquel encuentro calificó las relaciones bilaterales de «prioritarias y determinantes», y subrayó que la palabra de la locomotora de la UE era «fundamental» para España en el concierto europeo. «Siempre ha tenido un magnífico comportamiento con España», sentenció.
Cinco años después, y tras vivir meses tormentosos por la crisis del euro, Merkel y Zapatero volverán a reunirse, esta vez en Madrid, el próximo jueves. Con mano inflexible, la canciller ha marcado a su interlocutor el camino que debía seguir, y que él obedientemente ha asumido -drásticos recortes en el gasto y reformas de calado, aunque tuvieran un alto coste político-, para evitar una intervención de la economía española y el hundimiento del euro ante el acoso de los mercados. Es decir, la profe visita al alumno, al que previsiblemente otorgará una alta nota tras el giro de 180 grados imprimido a su política económica y la avalancha de medidas que ha adoptado desde el pasado mayo. Será acompañada por seis ministros, tres empresarios y el presidente de la Confederación de Sindicatos (DGB) para participar en una nueva versión de las cumbres hispano-germanas, que nacieron en 1983.
Esta vez, aparte de pasar revista a las relaciones bilaterales, los dos líderes tendrán poco tiempo para estudiar la crisis de la moneda única y las posibles medidas para impedir zozobras que la pongan en peligro.
Aunque ya hay consenso para crear un fondo de rescate permanente al que puedan acudir los socios de la UE con problemas, todavía no existe unanimidad en la figura legal de esa mecanismo y en sus atribuciones. Merkel llegará solo 24 horas después de la firma de la reforma de las pensiones.
Angela Merkel llegará el jueves a Madrid junto a seis ministros y empresarios