La baja de cinco controladores en Barajas obliga a cerrar dos pistas y causa retrasos de casi una hora
ECONOMÍA
José Blanco alertó el lunes del inicio de una «huelga encubierta» en el colectivo
02 ene 2010 . Actualizado a las 02:09 h.El primer día del año fue de todo menos tranquilo en el aeropuerto madrileño de Barajas, donde se produjeron retrasos de hasta una hora en los vuelos a causa de la ausencia de cinco controladores, lo que hizo que el aeropuerto operase solo con dos de las cuatro pistas de las que dispone.
Así, según fuentes de Aena, en la mañana de ayer solo acudieron a trabajar 13 de los 18 controladores previstos, por lo que se decidió cerrar dos de las pistas, aunque el pasado martes 29, con idéntico número de controladores, Barajas operó a pleno rendimiento con sus cuatro pistas abiertas al tráfico de aviones.
El ente que gestiona la red aeroportuaria española detalló que las cinco ausencias se deben a causas variadas y recordó que los turnos de estos trabajadores se programan con 90 días de antelación, tal y como establece el convenio. «En ese período se pueden producir desajustes en la programación», especificaron desde Aena, que subrayó que, hasta ahora, no se registraban problemas porque los controladores accedían a hacer horas extras para cubrir estos turnos, pero ahora la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA) ha dado orden de no hacerlo.
Desde hace semanas, USCA ha venido advirtiendo de que en los primeros días de enero podrían producirse problemas en Barajas debido a la «falta de personal». Un portavoz del sindicato negó que haya dado orden a sus afiliados para que no hagan horas extras, aunque destacó que «los ánimos están muy alterados por las continuas falsedades que se dicen del colectivo y es lógico que los controladores no quieran colaborar cuando les piden que hagan horas extras».
El propio ministro de Fomento, José Blanco, acusó el pasado lunes al colectivo de estar desarrollando una «huelga encubierta» que estaba generando problemas en numerosos aeropuertos españoles y subrayó que sus condiciones laborales situaban a los controladores aéreos españoles como unos «privilegiados» en el seno de la Unión Europea.
Demoras intencionadas
El cambio de turno no solucionó la situación de Barajas. A partir de las tres de la tarde, y con solo dos bajas en los 18 trabajadores convocados, las pantallas del aeropuerto seguían arrojando retrasos de hasta una hora en los vuelos, a pesar de operar ya con las cuatro pistas disponibles, lo que, según Aena, debería haber permitido «reabsorber las demoras de la mañana». Y es que varias aerolíneas consultadas por Efe denunciaron ayer que «se demora la puesta en marcha de los aviones hasta 60 minutos con los pasajeros embarcados».
Durante la jornada de hoy está previsto que acudan a sus puestos de trabajo 17 de los 18 controladores que están programados para los turnos de mañana y tarde, por lo que el ente público estimaba que «no debería haber problemas» en el tráfico aéreo.