Las cajas de ahorros mejoran su previsión para España por primera vez desde que empezó la crisis
ECONOMÍA
La Fundación de las Cajas de Ahorro (Funcas) mejoró ayer, por primera vez desde que comenzó la crisis, sus previsiones macroeconómicas para España. Los nuevos cálculos, eso sí, suponen tan solo una merma de una décima en la caída del producto interior bruto (PIB) nacional esperada para el 2009, que pasa del 3,7 al 3,6%. La estimación para el 2010, a su vez, se transforma en un decrecimiento del 0,6% desde una caída del 0,7%.
A pesar de lo mínimo de la mejora, Funcas resalta que la mayoría de los expertos dan por superado lo peor de la crisis, tanto en España como en el ámbito internacional. «El grueso del ajuste puede haberse producido ya», dice la fundación de las cajas. Tras esta pequeña luz al final del túnel se encuentran algunos indicadores del segundo trimestre que, de forma aún muy tímida, parecen señalar un cambio de tendencia.
Menor intensidad
Esto, advierte Funcas, no significa que la economía vaya a remontar, sino que el ritmo de la recesión pierde intensidad. «Los datos han sido mejores de lo esperado, sobre todo los relativos al paro y la confianza de los consumidores», señala la fundación, que apuesta por una «sustancial moderación en el ritmo de destrucción de empleo». La fundación espera una tasa de paro del 18,3% en el 2009 y del 20,4% un año después.
El retorno a crecimientos positivos en términos intertrimestrales, según las cajas de ahorros, podría comenzar a partir de abril del 2010. Funcas da por seguro que la inflación seguirá cayendo de forma intensa durante, al menos, este mes de julio. Será a finales de año cuando, añade la organización, el comportamiento de los precios comience a mostrar tasas positivas que, además, serán crecientes a lo largo del próximo ejercicio. Las medias del IPC para el 2009 y el 2010 quedan en el ?-0,1 y en el -16%, respectivamente. En este escenario, las cajas estiman que las subidas salariales medias serán del 2,9% este año y del 2% el que viene.
También resalta que el desequilibrio exterior continúa reduciéndose como consecuencia de la caída de la demanda nacional. Para el 2009, apuesta por una reducción del déficit por cuenta corriente del 5,8% del producto interior bruto.