La Consellería de Industria dio ayer por cerrada la recepción de ofertas para el concurso eólico, a falta de que en las próximas horas se reciba alguna petición más que no alterará el resultado global.
En total se han presentado 138 grupos distintos, tras los cuales figuran no menos de 600 empresas que, en conjunto, solicitan 24.590 megavatios eólicos repartidos en casi 900 parques de entre 10 y 50 megavatios. La cifra planteada por los ofertantes multiplica por 10,5 el número de megavatios en juego. Fuentes del sector informaron ayer de que la mayoría de los grupos concentran sus propuestas en las áreas de reserva señaladas por la propia Xunta para las nuevas instalaciones de aerogeneradores. Desarrollar los parques en estos territorios permite un desarrollo administrativo y urbanístico mucho más veloz. Sin embargo, el hecho de que muchos grupos se hayan centrado en los mismos espacios provoca que haya parques en competencia, lo que en la práctica significará una puja real por hacerse con las concesiones.
Industria quiere concluir el primer filtro de las plicas en un mes, de forma que a finales de julio se pueda publicar la lista de los candidatos admitidos. A partir de entonces, el pliego de condiciones del concurso abre un plazo de seis meses para adjudicar los 2.325 megavatios. El conselleiro nacionalista Fernando Blanco pretende recortarlo y resolver el futuro del sector eólico en octubre.
El negocio en liza facturará cerca de 1.000 millones de euros anuales a partir del año 2012. Se calcula una inversión de 5.500 millones, de los cuales 1.500 servirán para poner en marcha los proyectos industriales asociados a cada grupo.