El Osasuna B no tendrá problemas para mantener la categoría, que es el objetivo con el que arrancó la actual temporada. El filial pamplonica afronta el duelo de esta tarde con el objetivo de lograr la victoria y alcanzar los 45 puntos, que otorgan la permanencia de forma segura.
El equipo que dirige el ex futbolista profesional Miguel Merino ha llegado a esa cómoda situación después de sumar doce de los últimos treinta puntos en juego. En estos diez partidos solo ha perdido dos en su feudo del Tajonar ante la Ponferradina (0-1) y el Palencia (0-1), dos de los candidatos al ascenso.
Los jóvenes futbolistas rojillos tampoco puntuaron en su visita al campo del Guijuelo (1-0) y al Estadio de San Lázaro, en donde perdieron con el Compostela por 2-1. Luego arrancaron un empate frente al Mirandés en casa y contra el Racing en A Malata ?(1-1) y el Lugo en el Anxo Carro (0-0). La victoria la conquistaron en sus dos últimos encuentros en el Tajonar sobre el Montañeros (3-1) y el Celta B (3-2) y antes, en la vigesimoctava jornada, frente al Zamora a domicilio (0-1).
Por lo que se puede apreciar se trata de un equipo bastante irregular, una tónica en los conjuntos filiales, que no marca demasiados goles, pero que también encaja bastante pocos.