El Algarve abre el telón. En otras ocasiones la Vuelta a Mallorca se había convertido en el escenario del debut de los grandes nombres del ciclismo español. Pero en el 2010 el sur de Portugal, más generoso en sus temperaturas invernales, será el punto de partida de muchos de los ilustres del pelotón. Alberto Contador, vencedor del Tour 2009, abre la temporada en esta prueba, que ya se adjudicó el año pasado. También debutarán en tierra portuguesa Ezequiel Mosquera, líder del Xacobeo, y Samuel Sánchez, jefe de filas del Euskaltel. La carrera comenzará hoy con una etapa de 157,5 kilómetros que unirá Faro y Albufeira, y finalizará el próximo domingo con una contrarreloj individual de 17,2 kilómetros.
En esta carrera Contador no se verá las caras con Lance Armstrong. El Radio Shack del ciclista estadounidense acude al Algarve, pero con los lugartenientes del siete veces campeón del Tour: Levi Leipheimer, Andreas Kloden, Sérgio Paulinho y Tiago Machado.
El alto de O Malhao
Si los jefes de filas quieren realizar sus primeros tanteos en la montaña deberán esperar a la tercera etapa, en la que la meta estará situada en el alto de O Malhao, un puerto considerado de segunda categoría al que el pelotón llegará después de afrontar 173,7 kilómetros.
Contador señaló ayer que no llega a esta cita con el mismo nivel que en el 2009, cuando se adjudicó la prueba. Explicó que, debido al mal tiempo, no ha podido entrenarse en Madrid como él le gusta. Por eso aseguró que no llega a Portugal con la intención de vencer, ya que considera que su objetivo es rodarse, mejorar su estado de forma. Aunque, en la carretera, el madrileño ya ha demostrado otras veces su ambición.
Mosquera también ha señalado que el Algarve le servirá para ir tomando contacto con la competición. Es muy pronto para él. Su meta real es llegar al 100% a la Vuelta a España, en septiembre y este solo será el primer paso.
La carrera contará también con velocistas con galones. Las llegadas de la Vuelta al Algarve estarán animadas por Andre Greipel (Columbia), que demostró su gran estado de forma en Australia al imponerse en el Tour Down Under, y por Robbie McEwen (Katusha), que destacó en Mallorca junto al propio Greipel.
Veintitrés equipos estarán en la carretera durante más de setecientos kilómetros en una carrera con más brillo que nunca.