«Acabar la carrera sería la leche», dice Iván Raña en su habitación, en un hotel de Mallorca. El ciclista de Ordes cumple hoy su sueño infantil. Debutará en la Challenge, la prueba en la que el pelotón español comienza a rodar y en la que el Xacobeo Galicia abrirá la temporada. A su lado estarán Gustavo Domínguez, Eduard Vorganov, Juan Mourón, Alejandro Paleo, Delio Fernández, Vladimir Isaychev, Pedro Fernández, Héctor Espasandín y Marcos García. En esta primera jornada descansará el vasco Iban Mayoz.
«La verdad es que no me ha dado tiempo a pensar en la carrera. Tuvimos una reunión, nos entrenamos, me hicieron alguna entrevistilla...», comenta Raña. En la víspera de su estreno dice que su nervios no son comparables a los que sentía antes de afrontar una prueba de la Copa del Mundo de triatlón.
«Es diferente. Tengo que estar atento y preguntar muchas cosas. Yo no domino esto y estoy como cualquier otro neoprofesional», explica. Pero se aferra a su equipo, a ese componente colectivo que no encontraba en el triatlón. «Aquí vas con tus compañeros, te sientes arropado», apunta.
Un circuito urbano
Raña se encontrará con un circuito urbano de 11,6 kilómetros por Palma de Mallorca. Los ciclistas tendrán que dar diez vueltas. Será un entrante relativamente corto, pero no exactamente del gusto del ordense. «Estoy bien, pero tengo que afinar más. Preferiría una etapa en línea normal, no un circuito. Creo que sería mejor para debutar. Pero esto es lo que hay y hay que adaptarse. El circuito es explosivo y habrá que colocarse bien en las arrancadas de las curvas. Habrá que ver cómo respondo en las tres primeras vueltas para valorar cómo puedo rendir», indica. «Pero tengo ganas de competir y no hay que mirar el trazado, hay que fijarse en la hora de salida para estar allí puntuales, que yo soy muy dado a esas meteduras de pata», comenta.
El ciclista de Ordes, muy despistado, se sabe capaz incluso de llegar tarde al estreno, como le sucedió a Perico Delgado en la crono inaugural del Tour de Francia del 89.
El debutante recibe consejos variopintos: «Unos me dicen que vaya tranquilo, a rueda, y que ya está; si te pones bien adelante en los giros, puedes ir bastante bien. Otros, que es un fastidio estrenarse justo aquí. Claro, cada uno habla dependiendo de cómo le ha ido en Mallorca».
Iván Raña comparte habitación con el ruso Eduard Vorganov. Y bromea con todos. También con Pedro Fernández Hermida, que se estrena con este año con Xacobeo Galicia después de firmar una larga trayectoria en el ciclismo portugués. «Iván un campeón del mundo humilde. Es muy bueno. Yo hasta lo veo demasiado motivado», dice Fernández Hermida entre risas. Él también está ilusionado por haber regresado del exilio luso. «Estoy contento, pero no nervioso. Tengo ganas de comenzar. Me encuentro bien, empiezo mejor que otros años. Correré toda la Challenge, la Vuelta a Andalucía y la Vuelta a Murcia», dice.
Raña no disputará las cinco pruebas que componen la prueba mallorquina. Intercalará días de descanso. Esperará a que aparezca algún puerto durillo, pero no de primera. «Quiero verme en el pelotón subiendo, a ver qué pasa», dice con voz de niño que espera sus zapatos nuevos.
Pereiro y Valverde
El Caisse d'Epargne acude a Mallorca con Óscar Pereiro y Alejandro Valverde. El gallego, que ya se estrenó en el Tour Down Under de Australia con Lance Armstrong, correrá por primera vez en España después de la terrible caída que sufrió en el pasado Tour de Francia. «He visto a Pereiro y a Pablo Lastras. Y mañana [por hoy] estará aquí Joan Llaneras, que recibirá un homenaje. Me hace ilusión, todos son coleguitas», señala Raña.
Tras un silencio, el corredor regresa a su sueño. «Yo sé muy bien que me va a costar, pero tengo ganas de salir ya, de formar parte del pelotón, de estar ahí metido, entre los corredores», insiste. Hoy es el gran día. El final de un largo camino y el principio de otro.