Uno de los arrestados estaba tirado en la calle y ebrio, y el otro causó daños en contenedores de la zona de copas
13 jul 2008 . Actualizado a las 02:00 h.La Policía Local coruñesa detuvo la noche del viernes al sábado a dos jóvenes acusados de agredir e insultar a tres agentes del 092 y a personal médico del 061. Según explicaron fuentes de la concejalía de Seguridad Ciudadana, las lesiones que sufrieron los policías y los sanitarios fueron de carácter leve.
Uno de los sucesos se produjo sobre las once y media de la noche del viernes, después de que viandantes que pasaban por la plaza de Pontevedra alertasen al 092 de la presencia de una persona que estaba tirada en el suelo. Por parte del cuerpo de seguridad local se dio aviso a una ambulancia de la Cruz Roja y a otra del 061, que acudieron al lugar por si había que realizar algún tipo de asistencia sanitaria. Sin embargo, según explicaron desde la Policía Local, el joven, que presentaba evidentes signos de embriaguez, la emprendió a patadas y puñetazos contra el personal médico que intentaba ayudarle y también ocasionó lesiones a dos agentes. Finalmente fue trasladado al cuartel de la Policía Nacional, donde se presentó denuncia.
El otro incidente ocurrió después, sobre las tres de la madrugada, en la calle Juan Canalejo, situada en la zona de copas del Orzán. En este caso una patrulla del 092 que comprobaba el horario de cierre de los locales de hostelería advirtió que un joven estaba ocasionando daños en unos contenedores de basura. Al ser requerido para que se identificase, el chico insultó a los policías y se encaró con ellos, ocasionándole heridas leves a uno. También fue detenido y trasladado a dependencias de la Policía Nacional.
Estos dos sucesos se suman al ocurrido el anterior fin de semana junto a la plaza del Humor, en el que, supuestamente, un grupo de jóvenes también agredió de madrugada a policías locales y uno de los agentes realizó un disparo disuasorio hacia el suelo. Según explicaron responsables del gobierno municipal, no son habituales este tipo de conductas contra la autoridad local y esperan «que sea una cosa pasajera, coincidente con el principio del verano». Comentaron que la mayor parte de estos sucesos no pasan de los insultos.