Más de 650 trabajadores han sufrido ajustes de empleo en lo que va de año

C.?V.?G.

CARBALLO

29 oct 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Los expedientes de regulación de empleo en Ferroatlántica, en Cee, y en Laminaciones Arregui, en A Laracha, han afectado este año a 422 vecinos de la Costa da Morte. En la aplicación de la medida han intervenido los sindicatos y las negociaciones y los acuerdos alcanzados se han visto reflejados en los medios de comunicación. En el caso de Cee incluso hubo reuniones con la junta directiva de Neria.

Sin embargo, estos dos casos no han sido los únicos a lo largo de este año. Un total de 654 trabajadores han sufrido las consecuencias de esta medida con la que las empresas pretenden paliar los efectos de la crisis económica. El 68% de los afectados formaba parte de tres industrias de cierta importancia, pero en el listado de personas que se han quedado temporalmente sin trabajo hay desde carpinterías hasta pesqueros.

Aunque la construcción parece una de las actividades más afectadas por la situación económica, en la Costa da Morte solo hay dos expedientes de empresas directamente relacionadas con este sector. Una es la cerámica El Progreso de Buño, que fabrica ladrillos, y la otra, una promotora de Carballo que ha reducido la jornada laboral a cuatro de sus trabajadores.

Este año no hay ningún expediente para la extinción de los puestos de trabajo. La mayor parte son suspensiones que afectan a 351 personas en toda la zona. Los otros 32 trabajadores han visto reducida su jornada laboral, aunque en todos los casos se trata de medidas temporales.

Caolines

En la lista facilitada por la Consellería de Traballo también aparece autorizada la parada de Caolines de Vimianzo, que afectaría a toda la plantilla, formada por 33 personas. Sin embargo, la dirección de la empresa finalmente no hará uso de esta posibilidad, ya que parece que ha conseguido superar el bache, porque la autorización es solo hasta diciembre.

A pesar de que el sector de los servicios es el que aglutina mayor número de parados, solo hay una empresa, un restaurante de Fisterra, que ha recurrido a la regulación de empleo, con la suspensión temporal de tres puestos de trabajo.

Más abundante es el lista de los fabricantes de muebles que han tenido que optar por este sistema para hacer frente a la falta de demanda.