El Concello de Zas pone en marcha la primera red Wimax de la zona

La Voz

CARBALLO

Los trabajos comienzan hoy y darán cobertura de banda ancha de Internet sin hilos a una amplia zona rural

25 feb 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

El Concello de Zas será el primero de la Costa da Morte (y uno de los primeros de Galicia) que ponga en marcha una red Wimax. Se trata de una tecnología que, por ondas de radio, da acceso de Internet de banda ancha, especialmente útil en zonas del rural que, por su dispersión y orografía, carecen de ella, y donde es difícil y caro instalar redes de cable o el propio ADSL. Con esta tecnología, cada vivienda solo debe instalar una pequeña antena receptora.

De la parte técnica se encargará el grupo de empresas coruñés ITC, y justamente hoy tiene previsto comenzar los trabajos, que incluyen replanteos, análisis de cobertura o ubicación de torretas, entre otros aspectos. Paula Fernández, una de sus responsables, cree que en dos o tres meses los primeros usuarios ya podrán conectarse.

Esos potenciales beneficiarios no serán todos los del municipio. En realidad, los dos núcleos urbanos, Zas y Baio, ya tienen ADSL. La red Wimax se ha pensado para el resto, que es todo rural, y, en principio, dará servicio al 80% de la población que no tiene acceso a banda ancha. Para ello, se instalará un poste emisor en el Pico de Meda, uno de los montes más altos de la comarca, que proveerá una señal de gran potencia a dos emisores más pequeños. Uno de ellos se situará en la parroquia de Gándara, y el otro, en la de Meanos. El radio de alcance de cada uno de ellos es de 4 kilómetros, con lo que cubrirán una zona de ocho kilómetros de diámetro. Aunque pueden ser más, o menos, dependiendo de las zonas. Y serán más sin duda en el futuro ya que, como explica Fernández, esta es la primera fase del proyecto.

Cada usuario instalará una antena Wimax en su casa, de la que bajará un cable hacia una roseta de la que partirán las conexiones. Una, al ordenador, y otra, si se desea, al teléfono, que que el servicio, como el cable, permite estas opciones, y más. El tráfico mínimo garantizado de datos es de un mega, pero pueden ser más. Cada cliente podrá elegir paquetes de más o menos prestaciones, y más o menos precio. Las tarifas, apuntan los técnicos, se moverán en cifras muy similares a las que en la actualidad se pagan en las compañías del sector, más o menos a partir de veinte euros al mes.

Estos precios son posibles gracias a las subvenciones públicas, que permiten al cliente pagar solo el consumo. En caso contrario, se incrementaría notablemente. El despliegue del servicio cuesta unos 190.000 euros, de los que la Consellería de Industria aporta 90.000, la cantidad más elevada para proyectos Wimax en el rural gallego. El resto, entre el Concello y otras ayudas.