Seis cuadrillas de vigilancia móvil trabajan para prevenir incendios

BARBANZA

Durante la temporada estival está previsto que unas 300 personas formen parte de los equipos de extinción

26 jun 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

El verano ha llegado y aunque las temperaturas alcanzan, por ahora, valores menos elevados que los de otras temporadas, la amenaza de incendio en los montes de la comarca está muy presente. Desde hace tiempo, en los distritos forestales cuarto y quinto, en los que están incluidos los once ayuntamientos, seis cuadrillas de vigilancia móvil trabajan en las tareas de prevención.

Se trata de unidades formadas por dos personas que tanto limpian pistas como áreas recreativas y que también se ocupan, por ejemplo, de arreglar casetas de vigilancia o de examinar si los puntos de captación de agua están en perfecto estado. Pero lo más importante es que recorren el monte de una punta a otra y que, en el supuesto de que las llamas hagan acto de presencia, avisan de forma inmediata para que el fuego no devore el ya minado terreno arbolado de la comarca barbanzana.

Está previsto que esta semana a este equipo se unan, en ambos distritos, unas diez cuadrillas de acción rápida provistas de un pick-up que lleva una cisterna con 400 litros de agua. Estos profesionales también recorrerán los montes de la zona para detectar cualquier incidencia. Si advierten algo avisarán para que se desplieguen los equipos de emergencia y, al mismo tiempo, podrán sofocar un conato de incendio o comenzar las tareas de extinción.

Detección

La Consellería do Medio Rural concede especial importancia al apartado de detección, que se fundamenta en el desarrollo de una serie de acciones con un claro objetivo: descubrir, localizar y comunicar el inicio del fuego al centro de coordinación de distrito. Por eso, además de los puntos de control móviles hay otros de carácter fijo, que deberán informar de la situación de manera periódica, así como de las condiciones meteorológicas.

En la actualidad, Medio Rural posee en su página web unos mapas en los que aparecen identificadas las zonas de alto riesgo de incendios. Y todas las de la comarca están incluidas en esa categoría. La información se actualiza diariamente y el tiempo y la temperatura son factores determinantes a la hora de efectuar la catalogación.

Si importante es vigilar para evitar que el fuego pase a extenderse por el terreno, también lo es la extinción. Este año, la única que contrata cuadrillas es la Administración. Ni los ayuntamientos ni otras entidades ajenas pueden hacerlo. La contratación de personal la efectúa la propia Xunta o Seaga, una sociedad pública creada por la Administración gallega para realizar actuaciones relacionadas con el medio forestal. Desde luego, la prevención de incendios constituye una de sus prioridades.

Activos

La previsión es que, de forma paulatina, en los distritos cuarto y quinto haya un total de 41 equipos formados, cada uno de ellos, por siete profesionales. De estos, y teniendo en cuenta los obligatorios turnos de descanso de los trabajadores, cinco estarán siempre en activo.

El operativo al completo estará integrado por unas 300 personas, a las que hay que añadir otro amplio dispositivo: el que forman los agentes forestales, ya que en la comarca hay cerca de medio centenar. Y tambien están los ingenieros técnicos forestales y algunos otros refuerzos necesarios.