La conselleira informó ayer de la decisión al comité de la piscifactoría
10 ago 2011 . Actualizado a las 06:00 h.La conselleira de Mar, Rosa Quintana, confirmó ayer por la mañana a los miembros del comité de empresa de la piscifactoría Insuíña que, finalmente, la depuradora de bivalvos no se instalará en Morás (Xove). Tras solicitar la semana pasada una entrevista con la conselleira, Quintana recibió ayer a los representantes de los trabajadores de la planta de engorde de rodaballo más grande de toda España y la segunda de Europa. En el transcurso del encuentro les confirmó que la batea no se ubicará en Morás y que la Xunta ya baraja otras posibles ubicaciones, aunque no avanzó cuáles.
El comité se felicitó de la decisión tomada por la Xunta. Su presidente, Isidro Fernández, insistió en la confirmación por parte de Quintana, a la vez que también se mostró un poco sorprendido, ya que solo unas horas antes la conselleira se había reunido con representantes de cofradías gallegas (entre ellas, la de San Cibrao) y al final del encuentro no trascendió una confirmación tan rotunda.
Solo unos minutos antes de conocer la noticia, los miembros del comité habían debatido con la conselleira cuestiones técnicas del proyecto, le trasladaron el malestar de los trabajadores de Insuíña por los riesgos que la batea suponía para la piscifactoría y le reprocharon el no haber explicado con detalle el plan de la Xunta a los sectores más perjudicados por su ubicación en Morás.
El comité tiene previsto celebrar hoy sendas asambleas con los trabajadores de la planta -fijadas para las 13.00 y las 15.00 horas- con el objetivo de conocer la opinión de los empleados. En estos encuentros también se analizará si se desconvoca la concentración prevista para este viernes, 12, ante la delegación de Pesca en Celeiro.
Tanto los miembros del comité como el patrón mayor del pósito de San Cibrao, Javier Sánchez, advierten de que seguirán de cerca este asunto. El responsable de la cofradía reconoce que el sistema ideado por la Xunta para tratar bivalvos procedentes de zonas contaminadas de la costa gallega «é un mal menor», pero critica la falta de información que rodeó el proceso y la elección de Morás sin reunirse previamente con los sectores afectados. «Oxalá estiveran todas as rías saneadas. Agardo que busquen unha solución rápida», explicó ayer, a la espera de ser convocado a nuevos encuentros.