La infanta Cristina, imputada por tráfico de influencias en el caso Nóos

La Voz / EFE REDACCIÓN

ESPAÑA

Atlas TV

La declaración de la hija mediana del rey Juan Carlos I, mujer de Iñaki Urdangarin, se producirá en Mallorca el próximo 27 de abril. La fiscalía recurrirá (probablemente hoy) la decisisón del juez

04 abr 2013 . Actualizado a las 11:16 h.

La infanta Cristina ha sido imputada por tráfico de influencias en el caso Nóos. El juez Castro ha tomado la decisión tras dar por válidos los correos presentados por otro imputado en el caso, Diego Torres, en los que manifestaba que la hija del rey estaba al tanto de todo lo que ocurría en la fundación que dirigía su marido, Iñaki Urdangarin.

La infanta Cristina, de 47 años, tendrá que declarar el 27 de abril en los juzgados de Vía Alemania de la capital balear, en el marco de esta causa que investiga el presunto desvío de más de 6 millones de euros de fondos públicos al Instituto Nóos, presidido en su día por Iñaki Urdangarin.

El juez Castro estima que hay indicios de que la infanta Cristina pudo consentir que su parentesco con el rey fuera utilizado por Iñaki Urdangarin y su socio, Diego Torres, en las actividades de Nóos, lo que podría constituir «cooperación necesaria» o «complicidad» en los delitos supuestamente cometidos.

Cooperación necesaria o complicidad

El juez detalla en su escrito catorce indicios que hacen dudar de si la infanta Cristina conocía el uso de su presencia como vocal en Nóos y de su participación al 50 % con su marido en la inmobiliaria Aizóon. Si hubo «consentimiento y conocimiento presente y futuro» por parte de la Infanta, «podría ser calificado como un supuesto de cooperación necesaria a los delitos supuestamente cometidos» por Urdangarin y Torres, o «cuando menos de complicidad».

El juez considera «inevitable» que, ante tales indicios, la infanta preste declaración «al objeto de, si ese fuere el caso, se despeje cualquier duda», en el actual momento de la causa que describe como «la recta final de la instrucción».«No parece procedente que ésta se ultime gravitando la más mínima sombra de sospecha sobre la intervención que aquélla (la Infanta) haya podido tener», dice Castro. En el auto de 19 páginas en el que ha citado a la infanta Cristina, el juez José Castro señala que no despejar esta duda sería «un cierre en falso en descrédito de la máxima de que la Justicia es igual para todos».

Cesión de imagen de la infanta

El juez considera que la cesión de su imagen por parte de la infanta para conseguir contratos para el Instituto Nóos fue clave para el éxito de éste. Hasta hoy, la infanta era el único miembro de esa junta directiva (formada por Torres, Urdangarin, Revenga, la mujer de Torres y Cristina de Borbón) que no había sido imputado en el caso. En su última declaración ante el juez, en febrero, Urdangarin insistió en que la presencia de su mujer en ella era testimonial.

El pasado mes de febrero, el propio magistrado encargado del caso afirmaba durante el interrogatorio de la mujer de Diego Torres, Ana María Tejeiro que «si hay que imputar a Cristina de Bórbon, se le imputa».

El juez Castro ha mantenido un largo pulso con la Fiscalía antes de proceder a la imputación de la infanta Cristina. El fiscal del caso, Pedro Horrach, se negaba a citar a la infanta, siquiera como testigo, porque afirmaba que con las pruebas que hay en los más de 12.000 folios del sumario sería imposible sostener una acusación contra ella por malversación de dinero público. El magistrado ha tomado la decisión a partir de la declaración del exsocio de Urdangarin, Diego Torres, de los numerosos correos electrónicos aportados por este a la causa y de la declaración del secretario de las infantas, Carlos García Revenga.

Sorpresa en la Casa del Rey

Tras conocerse la imputación de la infanta Cristina, la Casa del Rey aseguró a través de un portavoz oficial que «no comenta decisiones judiciales». Horas más tarde, sí que se pronunció y mostró su «sorpresa» por el cambio de «posición» del juez, al haber decidido imputar a la infanta Cristina, al tiempo que ha mostrado su «absoluta conformidad» con la decisión de la Fiscalía de recurrir esta medida.

La Fiscalía Anticorrupción ha tomado esta decisión porque considera que no existen indicios criminales que relacionen a la infanta Cristina con las actividades del Instituto Nóos, que presidió su marido Iñaki Urdangarin y su exsocio Diego Torres, y por tanto no es partidaria de su citación para el próximo 27 de abril.

La citación como imputada de la infanta Cristina puede recurrirse en reforma ante el mismo juez que la ha dictado, José Castro, y a continuación en apelación ante la Audiencia Provincial de Palma, según recoge el auto judicial. Por tanto, la citación de la esposa de Iñaki Urdangarin en la investigación de las presuntas irregularidades en las actividades del Instituto Nóos, que presidía el duque, no es firme y podría aplazarse, suspenderse o revocarse.

Visita del abogado

El abogado de Urdangarin, Mario Pascual Vives, ha acudido esta tarde a la residencia del duque de Palma y la infanta Cristina, pocas horas después de la imputación de esta últim, lo que ha generado gran expectación mediática ante su casa de Barcelona. Vives ha llegado al domicilio de la infanta y Urdangarin en su moto, se ha parado unos instantes ante la casa y los servicios de seguridad le han abierto la puerta para que pudiera acceder al domicilio situado en el barrio de Pedralbes de Barcelona.

Con anterioridad y ante cerca de medio centenar de medio gráficos, entre cámaras de televisión y fotógrafos, se ha podido ver a la infanta Cristina acceder a su domicilio en coche. Agentes de la Policía Nacional mantienen un perímetro de seguridad en la casa de la infanta y la Guardia Urbana de Barcelona se preocupa de que circulación se realice con normalidad.