Los cartageneros son el mejor visitante de esta temporada mientras los célticos son de los peores como locales
20 mar 2010 . Actualizado a las 18:14 h.El campeonato de Liga afronta su último tercio con los objetivos de la mayoría de equipos definidos. En el caso de Celta y Cartagena poco o nada tienen que ver con lo que de ellos se esperaba en el inicio de esta campaña. Los celestes han pasado de ser por nombre un candidato al ascenso, a ver como la realidad les invita otro año a pelear por no descender. Justo este debía ser el papel de un recién ascendido, pero los cartageneros han variado sus metas hasta el punto de situarlas en meterse en una de las tres plazas que conducen a Primera.
La única coincidencia de estos dos bloques ha estado en el gusto por el buen fútbol a lo largo de la temporada. En el caso de los visitantes la evidencia la ponen los 42 tantos que han marcado que los sitúan como el equipo con más gol de Segunda División. Esa definición que han demostrado futbolistas como Toché, Víctor o De Lucas, les ha faltado a los celestes. Que Arthuro se fuese sin un solo tanto en Liga, o que Cellerino y Papadopoulos no hayan marcado aún cuando llegaron hace dos meses, explica gran parte de los problemas del Jogo bonito de los de Eusebio.
Julián Rubio, ahora ya ex entrenador del Albacete, acusó al equipo vigués la pasada semana, con una sorprendente osadía, de solo «marear la perdiz». Esto viene siendo la tan manida «determinación» que Eusebio le reclama a sus jugadores. En Balaídos no han sido capaces de lograr más que tres victorias en todo el campeonato. Para eso las tres fueron por la mínima ante Córdoba, Elche y Castellón. La ineficacia de sus hombres de gol ha sido clave para estos malos registros célticos que les sitúan como uno de los peores locales, solo mejores que el Castellón que es colista.
Por contra su rival de esta tarde es el mejor visitante de esta Liga. Han logrado cinco triunfos a domicilio, además de seis empates, y solo tres derrotas. Lejos de su campo solo ha caído ante tres de los aspirantes al ascenso: Hércules, Numancia y Real Sociedad, pero ha sido capaz de vencer en Vallecas al Rayo, el Nou Estadi del Levante, al Murcia en la Condomina, en el Carranza al Cádiz y en el primer partido de Liga frente al Girona en Montilivi. Su pero a domicilio lo ponen sus dos últimas salidas. No pasó del empate sin goles ante el Villarreal B, y antes igualó a dos tantos con el Castellón.
Los celestes tienen ante sí la oportunidad de lograr por segunda vez en esta temporada un pleno de seis de seis, o lo que es lo mismo encadenar dos victorias seguidas. También tienen al alcance lograr su mejor posición de la temporada, es decir, superar el puesto catorce. Las opciones de ver el vaso medio lleno y mirar hacia arriba en lugar de seguir temiendo por el descenso pasan porque sean capaces de ganar partidos como el de hoy.