Los expertos sostienen que en los días de más calor se pueden llegar a tender 21.250 toallas en el arenal de Samil
21 jul 2009 . Actualizado a las 14:25 h.Llega el verano, el calor e, inevitablemente, la playa de Samil se abarrota. Ya se sabe que los festivos y domingos de sol son los días más concurridos, pero, ¿cuál es la capacidad máxima de acogida del famoso arenal, que el domingo vivió uno de sus llenos gracias al poder de convocatoria del Festival Aéreo?
Antes de empezar con las cifras, hay discutir el método. «Para calcular la capacidad de una playa, no basta contar el número de toallas que caben en la extensión del arenal», aclara Gonzalo Méndez, profesor del departamento de Geociencias Marinas y Ordenación de Territorio de la Universidad de Vigo. Méndez explica que cada persona tiene el llamado «espacio de repulsión», es decir, que uno guarda siempre una distancia en relación al bañista desconocido que está sentado a su lado. Ese espacio es variable según la persona en cuestión y la cantidad de gente que se encuentra en la playa, pero Gonzalo Méndez propone fijarlo en un valor medio de dos metros por cada lado.
La segunda variable es el perfil de la playa. El experto en ordenación de territorio cuenta que a la hora de calcular la capacidad máxima de un arenal hay que saber qué tipo de personas la frecuenta ya que «cuantos más grupos grandes vayan, más espacio se ahorra». Por ejemplo, si uno va a la playa con un grupo de cinco amigos, se colocarán todas las toallas juntas, lo que significa que se ahorrará el espacio de repulsión que cada uno guardaría si fuese a la playa solo.
Una playa semiurbana
El Ministerio de Medio Ambiente cataloga la playa de Samil como «semiurbana», pero ¿qué significa eso en números? «Muestra que a Samil van tanto personas solas, como familias con niños» y que, por lo tanto, el promedio general de la playa deberá rondar las tres personas por grupo de bañistas.
Por fin, la tercera variable es la definición de «capacidad total de un arenal». En este punto, los expertos sostienten que existen tres posibilidades. Se puede considerar que una playa está en el límite de su capacidad cuando su arenal se encuentra totalmente ocupado, pero respetando los espacios de repulsión. En ese caso, y considerando que a la playa de Samil van, de media, grupos constituidos por tres personas, se concluye que en el arenal existe espacio para 12.750 bañistas.
La segunda posibilidad es la de considerar que una playa está en su capacidad máxima cuando ya no hay espacio para caminar entre las toalla, o sea, que ya no se respeta el área de repulsión. En ese caso, serían necesarias 21.250 personas para llenar Samil.
Por fin, existe un último médoto de cálculo que consiste en considerar que la playa alcanza su máxima capacidad cuando ya no hay espacio para que los bañistas se sienten. En ese caso, se recurriría a la misma metodología que se usa para saber el número de personas que participan en una manifestación; así, el domingo pasado en la playa había una media de tres personas por metros cuadrado, con lo que el arenal -no se cuenta el paseo- pudo albergar a un total e 127.000 personas.