Aritz López Garai ya se ve vestido de celeste. El mediocentro vasco admite que el acuerdo es casi un hecho y que el 20 de julio estará en Vigo para iniciar la pretemporada. «El Celta es el mejor equipo de Segunda y por lo tanto no me lo podía pensar cuando surgió la oferta. Para mí es un paso adelante».
Por orden del guión, le queda un partido con el Castellón y seguramente el Celta ha decretado orden de silencio, López Garai no habla de acuerdo al 100% pero casi. «Quedan tres o cuatro cosillas que limar, pero está casi todo hecho», admite mientras reitera que no se podía negar al ofrecimiento celeste.
López Garai descarta que pueda vivir el Celta un tercer año horrible en la categoría. «Son cosas extrañas y propias del fútbol, situaciones que suceden de vez en cuando pero en Segunda el Celta tiene que ser siempre un equipo que luche por el ascenso porque su sitio es la Primera División».
Su fichaje había sido vinculado a la relación con Torrecilla, pero con el nuevo director deportivo céltico solo coincidió cinco meses en Salamanca «porque yo me fui al Castellón pocos meses después de que él llegara al club».
Aritz no se considera un especialista de Segunda División, pero casi. Lleva tres temporadas en la categoría y tanto en Salamanca como en Castellón ha jugado una media de 40 partidos. «Me he adaptado muy bien a la categoría, pero también me encantaría probar en Primera División con el Celta». De entrada llegará a Vigo con la ilusión de ascender.
Lo único que falta por anunciar es la duración de la vinculación contractual en Vigo, aunque todo indica que será por espacio de tres temporadas. En Balaídos López Garai aspira a asentarse y en hacer olvidar a Rosada.