Ramón Martínez tiene claras las premisas que rigen el perfil de futbolista que tiene que buscar en el mercado. Por una parte tiene que ser un jugador nacional o comunitario, porque las plazas de extranjero están cubiertas con Okkas y Diego Costa. Los jugadores de equipos de Primera División que no estén contando con muchos minutos son el objetivo más apetitoso.
La otra premisa muy importante es que el desembolso económico a realizar tiene que ser el mínimo, por lo que solamente se afrontaría la llegada de jugadores en opción de cedidos, como mucho con una opción de compra. La ficha tampoco podría ser muy elevada, por lo que si es un jugador cotizado, el club de origen tendría que seguir haciéndose cargo con un porcentaje elevado de su ficha.
El margen de maniobra es por tanto muy reducido, aunque ya en el verano se manejaron en la mayoría de las incorporaciones estas limitaciones.