Nuria María Moltó Ruibal y Thomas Yves Marie D'Aboville son naturales de A Coruña y Versalles (Francia), respectivamente. Se conocieron en Madrid y fijarán su residencia en París, donde ella ejerce de diseñadora gráfica y él de auditor. El pasado viernes contrajeron matrimonio en el salón noble del Ayuntamiento de Santiago, en un emotivo acto oficiado por la concejala de Urbanismo, Mercedes Rosón; en el que estuvieron rodeados de numerosos familiares y amigos.
La boda de Nuria y Thomas Yves tenía la peculiaridad de que buena parte de los invitados eran franceses, por lo que los novios elaboraron un folleto en el que se recogían los textos y poemas en castellano y francés para facilitar el seguimiento de la ceremonia.
Thomas Yves, aparentemente más nervioso que la novia, llegó rodeado de los más de sesenta invitados; mientras la novia, vestida con el tradicional traje largo, con escote palabra de honor y en tono blanco roto, aguardaba para subir la escalinata del Pazo de Raxoi. La elección de la boda civil en lugar de una religiosa, según comentó Thomas Yves Marie D'Aboville al final del acto, se debe a que, aunque han tenido «una educación cristina», no son practicantes y prefieren la boda civil. En la elección de Galicia, en lugar de Francia, donde residen tanto los novios como gran parte de los invitados, primó el hecho de que «Nuria es gallega».
Finalmente, para decantarse por Santiago fue determinante el entorno y el patrimonio histórico-artístico de la capital de Galicia. Nuria es tajante en su respuesta: «No hay color, mira el entorno, es una maravilla». Algo que también comparten sus invitados, que elogiaron tanto el Pazo de Raxoi como la plaza del Obradoiro y la Catedral.
Después del acto del matrimonio y, ya más relajados, los novios aprovecharon para posar sentados en la tarima central del salón rojo del Concello, que corresponde a la sala noble donde se ofician todas las recepciones del Ayuntamiento.
En el Concello de Santiago se pueden oficiar bodas tantos los sábados -lo más habitual- como los días laborales. Actualmente, el alcalde tiene delegadas la competencias de bodas en las cinco concejalas del grupo socialista, pero también pueden celebrar matrimonios otros concejales del Ayuntamiento. La tasa por matrimonio tiene un coste de 105,30 euros.