Dos de los implicados, que se dedicaban en exclusiva al «negocio», entraron en prisión preventiva sin fianza
20 abr 2008 . Actualizado a las 02:00 h.La policía nacional ha dado un golpe al tráfico de estupefacientes en el entorno de la ciudad con la detención de ocho personas vinculadas a esa actividad. El resultado es fruto de un operativo desarrollado en dos fases por funcionarios de las Brigadas de la Policía Judicial y de Seguridad Ciudadana de la Comisaría de Santiago.
En la primera fase del operativo montado cayeron en manos de la policía tres personas, J.B.B., J.J.P.B. y M.J.R.R., y en la segunda fase cinco más, S.S.R., R.G.S., P.V.V., O.L.M. y R.F.B. Estos cinco fueron trasladados ayer al citado juzgado. Los otros tres ya habían pasado antes a disposición del juez como presuntos responsables de un delito de tráfico de cocaína. Todos son españoles y tienen edades comprendidas entre los 24 y los 49 años.
No todos tienen el mismo grado de implicación en los hechos, ya que algunos de los detenidos están más involucrados que otros en esta lacra social. Dos de los detenidos vivían de esta actividad, sin ningún otro oficio, y los restantes colaboraban en distintas ocasiones con más o menos intensidad en las tareas de distribución. Los dos de dedicación exclusiva, con antecedentes penales, entraron en prisión preventiva sin fianza. Los demás quedaron en libertad sin fianza (excepto S.S.R.) con obligación de presentarse en el juzgado los días 1 y 15 de cada mes.
A fin de llegar al ovillo de las detenciones, los agentes de la brigada judicial compostelana iniciaron sus pesquisas tirando del hilo de unos consumidores habituales de cocaína. La policía se apercibió que estos se desplazaban a las poblaciones situadas en la zona sur de la ciudad para aprovisionarse de la droga. Allí establecían los contactos pertinentes para la obtención del ilegal artículo.
Los investigadores policiales pudieron identificar de esta manera a un serie de personas que se ocupaban de distribuir la sustancia al menudeo y que la policía conoce como «grameros». Estos individuos establecían sus citas en diferentes locales de la carretera N-550 que une Santiago y Padrón; de la carretera que va a A Estrada, concretamente en Cacheiras; y en la carretera de Noia, especialmente en el entorno de Bertamiráns.
Los días de mayor ajetreo para los trapicheros venían siendo los fines de semana o festivos, que es cuando los consumidores frecuentan los locales nocturnos y sienten la tentación de acentuar la juerga con unas dosis de cocaína. Los traficantes disponían de surtido para atender la demanda y del instrumental necesario. En los tres registros efectuados la policía intervino 586 gramos de cocaína, que supone una venta en menudeo por un importe superior a los 30.000 euros. Asimismo intervino 15.000 euros en efectivo, tres balanzas de precisión, 16 móviles, dos vehículos, 29 comprimidos de Trankimazín de 1 mg, efectos y documentación.