La iluminación festiva de la capital funcionará menos días para ahorrar

OURENSE

Un nuevo reglamento municipal establece que la campaña de Navidad durará en torno a veinte días

11 ago 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Ourense está dispuesta a echar el freno en el consumo energético vinculado a la iluminación festiva en las calles de la capital. Después de las críticas a la pasada campaña navideña -los ecologistas solicitaron al Concello que redujese el calendario de encendido- el gobierno local ha redactado un reglamento municipal que pone coto a las luces decorativas.

El documento elaborado por la Concejalía de Comercio y que cuenta con el consenso de las tres formaciones políticas del gobierno local entrará en vigor una vez supere los trámites administrativos, con su exposición en el Boletín Oficial de la Provincia. Una de las principales limitaciones llega a la hora de fijar el calendario de funcionamiento de las luces ornamentales. El artículo 2 establece que la campaña de Navidad estará restringida a un máximo de 168 horas, lo que supone que funcionará en torno a veinte días. Según la nueva normativa, las luces solo podrán estar encendidas cuatro horas en un día normal, siete los fines de semana y los días 24 y 25 de diciembre, y hasta doce horas en Nochevieja y la víspera de Reyes.

Para el resto de actividades anuales, incluidas las fiestas de la capital, la ordenanza no establece un límite expreso, aunque aclara que la decisión definitiva será de la junta de gobierno, una vez que se reciba la solicitud de autorización.

En el empeño por potenciar el ahorro energético, el Concello de Ourense también marca los criterios para la elección de las bombillas. En este caso, se prohíbe la utilización de lámparas de incandescencia de seis vatios o superior. Además, se recomienda el uso de sistemas alternativos que favorezcan el bajo consumo.

Seguridad

Otra de las preocupaciones que refleja la ordenanza sobre iluminación temporal en las calles de la capital hace referencia a la seguridad. En este sentido, se extremarán los controles a la hora de vigilar la fijación de los arcos decorativos y los puntos de anclaje sobre los que se sustenten, sobre todo, cuando afecten a las fachadas de los edificios.