¿Quiénes son?

Enrique Clemente Navarro
Enrique Clemente LA MIRADA

OPINIÓN

28 oct 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Obama quería saber quién es exactamente Angela Merkel. Y no se le ocurrió nada mejor que pincharle el teléfono para cotillear. Eso entre aliados está muy feo, aunque, dicen los cínicos de la realpolitik, es lo normal. El espionaje es tan viejo como el mundo. La información es poder. Claro que esta vez lo han pillado con el carrito del helado. Pero en el fondo tiene razón el presidente de la superpotencia y gendarmería mundial. Esa gran esperanza negra que se nos ha revelado un auténtico Gran Hermano con grandes orejas que espía a todo el mundo y ordena sin pestañear el asesinato de supuestos terroristas, aunque sea a costa de causar daños colaterales, es decir la muerte de civiles, niños y mujeres, con sus siniestros drones. Pero sí, es necesario saber quién es esa mujer surgida del frío de la Alemania comunista, donde hizo carrera política, que descabalgó sin el menor escrúpulo al que había sido su mentor, Helmut Kohl, pringado hasta las cejas en un escándalo de financiación ilegal de su partido (¿les suena?), y luego se reconvirtió en la canciller que impone con su aspecto de ama de casa bonachona y tranquila las políticas de austeridad que machacan a los ciudadanos de la Europa del sur con el beneplácito de sus Gobiernos. Parafraseando a Churchill, que siempre viene bien en estos casos, Merkel sigue siendo en cierta medida un acertijo envuelto en un misterio dentro de un enigma. ¿Es una gran política o una oportunista? ¿Es tan apacible como parece o la mala leche va por dentro? ¿Alguien conoce a la verdadera Merkel? ¿Obama ya la tiene calada? Y le doy la vuelta, ¿quién es en realidad Barack Obama? ¿Existe, es el que encandiló con el yes we can o un doble creado por la CIA?