Gramática de los abuelas «ghaleghas»

YES

Marina113

Repasamos algunas de sus mejores frases

11 may 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Su genialidad bien merece un monumento. Quién no ha compartido alguna de las salidas más ocurrentes de nuestras queridas abuelas. Recordamos los «hits» más sonados en un sentido homenaje

«FERNANDOL» Y «ARCOLITO»

En esa generación que tuvo que salir a flote como buenamente pudo, el «Fernandol» (Frenadol) era y es remedio de santo. No hay medicina como ella para curar un buen resfriado. Eso y unos buenos vahos de «arcolito» o «alcolito» (eucalipto), que nunca un árbol dio tantas formas de referirse a él. Lo mismo que la «olivera» (aloe vera), que decía mi abuela que era tan fabulosa como difícil de pronunciar. Otros hits aparecen cuando corrigen la gheada dando lugar a vocablos de los más variopintos. Así, la sortija se convierte en «sortiga», en la «longa» (lonja) se va a comprar pescado y el cielo está «despegado» (despejado).

¿QUÉ HAY DE COMER?

Son ellas las que siempre han estado al frente de los fogones. Por eso tienen todas las respuestas del mundo si les preguntas qué hay de comer: «Caralladas que hai buraces, na ribeira camaróns ...», decía mi abuela sin terminar la rima porque corría el riesgo de ser censurada con tres rombos. Otras responden: «Lingua de miñoca», y se te queda cara de pez intentando digerir la contestación. Pero lo que más les revientan son las críticas culinarias y con un «moito canta Marta, despois de farta», callan a cualquiera que se atreva a poner alguna objeción. NaNatural. Faltaría más.

«CHÍMPALLE UNHA GHASEOSA»

La lista de frases ingeniosas es interminable al igual que variada, pero en este homenaje no pueden faltar alusiones al refranero popular. Porque otra cosa no, pero hay días en los que «o demo ten cara de coello» y «o que ten cu ten medo». Por eso, cuando el viento sopla a su favor, en seguida se vienen arriba con un «chímpalle unha ghaseosa». Chimpo, chimpo, chimpo, allá donde estéis abueliños.

 

RETRANCA Y ALGO MÁS

Incluso tiran de retranca gallega, como no podía ser de otro modo: «Pasa Nadal, que xa vén aghosto » y se atreven a aplicar el galenglish, como aparece en la canción de Lidia Botana, donde homenajea a su abuelo emigrante en el Reino Unido: «Apaghaches a lus da living room, apaghei, apaghei, apaghei !». En esto de la retranca son los reyes absolutos: «Espera, espera, espera... se esperasen así as lebres non quedaba ningunha!», porque el que espera desespera: «A ver, a ver... a ver dixo un cegho». Y no les recomiendes que se callen, que enseguida te espetan un «se calo non cho digho» con más razón que un santo.

LA LISTA DE FAMOSOS

Un apartado especial merecen los nombres de famosos. Y es que algunos son endiablados. Hay quien todavía recuerda cómo su abuela gritaba viendo jugar al Barça en el salón de su casa: «Vamos Estórico (Stoichkov)!» o al pobre de Koeman lo bautizaban como Spuman. Fraga siempre fue «Fragha» y Felipe González: «Ai , Felipiño, Felipiño». Aunque para algunos de ellos, «coma Suárez, ninghún». También hay quien en esto de cambiar el nombre a una conocida cadena de bricolaje, se le dio por bautizarla como Marylin Monroe. O quien llama al expresidente Obama, «Baoma» y le añade una «ese» final que no deja lugar a dudas. También se meten con el independentismo catalán, tan de moda en estos días, porque «o Orriol Llongueras (Oriol Junqueras) non ten un pelo de parvo», nunca mejor dicho.