LA LISTA ES MUY FEMINISTA para encontrar un macho hay que bajar hasta el puesto número ocho del censo de mascotas gallegas. Las perras lideran un ránking muy lunático en el que predominan los nombres con L. ¿Se imaginan cuáles son los Sara y Martín del mundo animalístico?
17 oct 2018 . Actualizado a las 01:15 h.No hay padrón perruno como tal, pero en YES hemos echado un vistazo al censo del Regiac (Registro Gallego de Identificación de Animales de Compañía, que depende de la Consellería de Medio Ambiente y donde por ley tienen que estar registradas las mascotas de más de tres meses) para ver cuáles son los nombres de perro más puestos en Galicia. Un dato relevante: hay más perras que perros, ya que para encontrar el nombre de macho más repetido hay que bajar hasta el puesto número ocho. Otro, somos muy, pero que muy, lunáticos. Porque el primer puesto lo ocupa Luna (12.134) y segundo, la versión gallega, Lúa (7.567). Muy cerca, le sigue Perla (7.549) que solo necesita unas pocas camadas para lograr un eclipse. En cuarta posición está Chispa (6.423); en quinta, Linda (5.811); en sexta, Laika (5.740), y en séptima, Kira (5.293). No me digan que hasta aquí no parece que el ránking está influenciado por el movimiento #metoo. Los perros quedan relegados al último tramo del top ten canino. Rex (5.160), Thor (4.964) y Pancho (4.601). ¡Aún va a tener razón mi abuela, que ya lleva dos Panchos, de que es tendencia!
«Esto viene a ser un poco como cuando eliges los nombres para poner a los hijos. Con los hijos, casi siempre los eliges antes de verles la cara, en cambio con los perros sí que puedes decir “le queda bien”», dice Rita Galiño. En su casa conviven Thor y Kira (en la imagen), que es como si tuvieran una Sara y un Martín, que no es tan raro. Y aunque no se lo crean, no se han dejado arrastrar por el censo, sino que los nombres de los nuevos habitantes de la casa se han votado a mano alzada en asamblea. «Somos cinco en casa, y cada uno vamos proponiendo el que más nos gusta. Era un pastor alemán, y mi hijo tenía claro que quería un nombre con fuerza, luchador. Al final de todo quedaron Thor, por la película, y Sheldon, que es un personaje de la serie The Big Bang Theory», cuenta Rita. ¿Adivinan cuál ganó si lo que iban buscando era fuerza? Pues como no podía ser de otra manera, el dios del trueno y fuerza en la mitología nórdica y germánica.
En este hogar no hay riesgo de empate, porque entre los cinco son tan diferentes que nunca hay miedo a quedar en tablas. La única tabla de esta casa está en la cocina, donde tienen la pizarra en la que se toman las decisiones más importantes que afectan a la convivencia. Con Kira también fue un proceso democrático, pero tampoco tuvo mucho debate. «La fueron a recoger mis hijos y unos amigos de la perrera, y desde que regresaron con ella, mi hija ya dijo que tenía cara de Kira, que le pegaba, que tenía ojos de buena. Yo les dije que trajeran un perro un poquito grande porque la finca es muy grande y para que defendiera, pero solo defiende con besos y abrazos». A pesar de que son los nombres más repetidos entre los perros, en esta familia no tienen esta sensación. «Thor solo conocí a uno, y Kira no conozco a ninguna. Leí que había más y habrá. También escuché lo de Rita [su nombre] dos o tres veces», dice riéndose.
Tienen muy claro que las únicas voces a tener en cuenta son las de los cinco de la familia, porque si fuera por su padre, Thor y Kira serían Moro y Lúa. «Yo tuve una Lúa, pero hace más de veinte años, y mi padre quería que le pusiéramos Lúa otra vez. Al final él tiene una ahora que se llama así. Con Thor nos decía que no era nombre para un perro, que le pusiéramos Morito, y a mí me gustaba Moro o Morito, porque aunque hoy suena feo a mí me quedó de mi abuelo», comenta Rita.
¡¡¡TOBY!!! Y VIENEN SIETE
Como en todo, hay quien no se raya a la hora de buscar nombre para su nuevo compañero, y dispara casi el primero que se le pasa por la cabeza, quien mantiene sus preferencias a pesar que circunstancialmente se encuentre entre los más demandados y quien se estruja las neuronas con el fin de ser original, como Miriam Muñoz, una adiestradora gallega. «Yo rebusco muchísimo, porque no quiero decir Toby y que vengan siete a la vez. Procuro que tengan algo de significado más que terminar rápido. Hay gente que dice, ¿cómo lo llamo? ¿Dama? Sí, es bonita le pega, y no se complican más», explica.
Menos Xena, que dice que lo ha oído alguna vez, el resto de los nombres de sus mascotas se llevan sin duda el punto extra a la originalidad. ¿O tienen entre sus allegados a algún Kronos, Kapo, Leah, Coraxe y Ántrax?
No pasa lo mismo con Bimba. Creo que somos varios en la sala los que tenemos la sensación de que se han multiplicado en los últimos años. Sin dar muchas vueltas nos encontramos con una en As Pontes. «Fue mi hermana la que le puso este nombre. En diciembre va a hacer cinco años que está conmigo. Hasta ese momento no se ponía mucho, pero desde nuestra Bimba empezaron a bautizar a muchísimas por nuestra zona. Ahora mismo puede haber unas cinco. ¡Es una plaga de Bimbas!», cuenta Ana Alonso.
A grandes rasgos estos serían los Sara, Noa, Hugo y Martín de las mascotas. Y no se extrañen si algún día estos nombres se cuelan entre los más repetidos. «Cada vez más se les ponen nombres de personas», apunta Óscar Roel, de Cans School. Lucas apunta al doblete.