Afronta 4 años de cárcel por filtrar secretos comerciales a una empresa rival
VIGO CIUDAD
Acusan a un ex trabajador de soplar precios de material sanitario durante el covid
17 mar 2023 . Actualizado a las 05:00 h.En Vigo no hay muchos casos de espionaje industrial por lo que el juicio que se aplazó ayer tenía gran interés. Un ex comercial de una empresa de venta de camillas y material sanitario compareció ayer en el Juzgado de lo Penal número 3 de Vigo para responder por un supuesto delito de revelación de secretos de empresa.
La Fiscalía pide cuatro años de cárcel al ex empleado por, supuestamente, filtrar correos confidenciales a una empresa rival después de dejar la empresa tras el confinamiento por covid del 2020 y otorgarle una ventaja comercial de cara a mejorar los precios de la competencia ante los clientes. Su antigua empresa le acusa de soplar los precios que cobraba y las ofertas que hacía. El juicio se aplazó al 31 de mayo porque la defensa presentó ayer una prueba de último minuto en referencia a unos correos electrónicos que podrían darle un giro al caso y que la acusación quiere contrastar con un margen de tiempo.
El nuevo informe fue elaborado por la empresa Lazarus Technology, unos forenses informáticos expertos en rescatar datos de teléfonos y ordenadores. Creen que han encontrado pruebas que podrían exculpar a su cliente o, al menos, generar una razonable duda sobre cómo fueron los hechos.
El implicado trabajó entre abril del 2018 y junio del 2020 para una empresa redondelana que fabrica y distribuye material para emergencias y primeros auxilios. Según la Fiscalía, tenía responsabilidades en tareas del área comercial y de acceso a datos de clientes y listado de precios de material con el que la sociedad comerciaba.
La Fiscalía sostiene que en julio del 2020, al mes de romper su vínculo laboral, «se aprovechó de la información que había obtenido durante la relación con su antigua empresa como trabajador por cuenta ajena y haciendo uso de la cuenta de correo que la mercantil había dispuesto para el desempeño de sus funciones, con ánimo de contravenir su obligación legal de sigilo y causar un quebranto a la libre competencia, se puso en contacto con otra empresa que participa en el sector de la perjudicada».
Según la acusación, a las 9.50 horas del 22 de julio envió un correo electrónico con información confidencial a una empresa rival de la provincia de Valencia, que se dedica a la calibración, verificación y reparación de equipos médicos. Para la Fiscalía, el ex empleado le otorgó una «ventaja comercial» en la conformación de ofertas con las que presentarse a los clientes del sector.
En dicho correo, daba datos de un presupuesto y de información de precios correspondientes a abril del 2020, en pleno confinamiento y cuando el material sanitario estaba muy cotizado por causa de la pandemia de covid. En concreto, su antigua empresa le había ofrecido a un cliente una partida por 287.818 euros que incluían los precios de productos en partidas de cien unidades. Media hora después, la empresa rival le contestó: «Gracias, voy a contrastar y os digo».
La Fiscalía, además de cárcel, pide para el ex empleado una multa de 6.480 euros, las costas y el pago de una indemnización a su antigua empresa en las cantidades que los peritos estimen adecuadas por los perjuicios causados. Dentro de dos meses y medio se sabrá si el informe de Lazarus Technology arroja más luz sobre este caso.