La Fiscalía ata cabos y se pregunta si quizás el implicado sacó más dinero en negro puesto que el piso fue tasado en 113.000 euros, pero no tiene pruebas de ello. Admite que no consta que el inmueble se hubiese vendido por un valor superior al escriturado.
El Ministerio Público reclama que, además de los 2 años y 8 meses de cárcel por el delito de apropiación indebida, el acusado devuelva los 45.000 euros o lo que falte y que compense por los perjuicios al vender el inmueble por un valor inferior al mercado.