Isabel Barreto era sin duda una persona decidida. Y, tras casarse de nuevo, ahora con el general Fernando de Castro, participó en otra expedición que la llevó a Acapulco y a Guanaco. A su regreso a Lima, algunas fuentes dicen que falleció. Otros autores creen que regresó a España, para reclamar sus derechos sobre las islas Salomón. Esta segunda versión afirma que terminó sus días en Galicia.
Isabel Barreto, nacida hace ahora 450 años, marcó un hito como la primera almirante de la historia, pero es un personaje poco publicitado de la era de los descubrimientos. La buena noticia de ser ignorada por los cronistas es que Hollywood nunca le hará una película. No es probable que le gustase verse retratada de «fierecilla domada» en cualquier entrega de Piratas del Caribe.