Manu Collazo perdió la vida en el accidente mortal del pasado martes en Domaio
15 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Moaña está conmocionada. El fallecimiento de Manuel Rodríguez Collazo a sus 43 años ha causado un gran impacto en el municipio de O Morrazo. Fue la víctima del trágico accidente que tuvo lugar el pasado martes en la PO-551, en Domaio. Un turismo colisionó contra Manuel cuando este iba pilotando su moto. Los servicios de emergencias no pudieron hacer nada.
Precisamente, este moañés era un gran aficionado a las motocicletas. No hay ningún motorista de O Morrazo que no lo conociese. Fue el encargado de organizar una concentración en Reibón tras la muerte del piloto, también natural de Moaña, Dani Rivas en el 2015. Organizó el acto de forma desinteresada y tuvo una gran repercusión en el municipio. La propia familia de Rivas acudió y le agradeció a Manuel su implicación.
Pero si este joven motorista llegó a ser tan querido y conocido en Moaña fue por su labor como DJ bajo el nombre artístico de Manu Collazo. «Era el que ponía la música en prácticamente todas las bodas que se celebraban en O Morrazo», recuerda Alba Santos, amiga íntima del fallecido. No participaba solamente en los enlaces, también llegó a organizar despedidas de soltero para varios de sus amigos, estuvo al frente de la animación de numerosos eventos, colaboró con el Concello en la organización musical del festival Intercéltico del 2016... Pero Manu Collazo traspasaba las fronteras de Moaña. Pinchaba música en la mayoría de locales nocturnos de la zona del Arenal, en Vigo. Fue en la ciudad olívica, precisamente, donde se estableció hace quince años. Allí formó familia con una viguesa con la que tuvo un hijo, Brais, que ahora tiene diez años. Él era natural del barrio de O Con de Moaña. También tenía otra hija.
«Era el Pepe Reina de aquí. Se encargaba de la animación en numerosos eventos. Se prestaba a todo. Siempre estaba ahí y siempre de buen humor, era muy optimista. Todo el mundo le quería», recuerda Alba Costas. Esta amiga de Manu volvía de Vigo en la tarde-noche del pasado martes cuando se encontró con un enorme atasco causado por el accidente mortal. En ese momento no pensó que el hombre que yacía en el suelo era su amigo íntimo. «Al parecer estaba adelantando con su moto a los coches que estaban parados a causa del atasco habitual que se produce por esa zona cuando uno de los vehículos que venían para el otro carril giró para meterse en un camino sin poner el intermitente y Manu no tuvo tiempo de evitarlo», recuerda Alba Costas. Pese a, como siempre, llevar casco y unos guantes y una cazadora protectores, pero el impacto con el coche fue tan grande que le ocasionó la muerte prácticamente de forma inmediata.
El cuerpo de Manuel Rodríguez Collazo fue velado ayer en el tanatorio Vigomemorial. Hoy se celebrará el entierro en su tierra natal de Moaña. Se espera la asistencia de cientos de personas procedentes de todo O Morrazo y también de Vigo.
Pinchaba música en la mayoría de bodas de Morrazo y en locales del Arenal de Vigo