Así fue el incendio que calcinó Viveros de Sabarís y tiñó de negro el cielo de Baiona
BAIONA
Pese a la virulencia de las llamas, no hubo heridos ni se desalojaron las viviendas cercanas. Se investigan las causas del suceso que alertó a O Val Miñor
11 sep 2023 . Actualizado a las 00:58 h.Un espectacular incendio pasadas las 19.00 horas desató en la tarde del domingo todas las alarmas en Baiona. El fuego originado en las instalaciones de Viveros de Sabarís se extendió rápidamente y con gran virulencia, calcinó buena parte de la nave. La rápida intervención de los servicios de emergencia, sin embargo, permitió controlar con éxito las llamas en algo más de una hora.
Una enorme columna de humo negro alertó a los vecinos, que avisaron al servicio 112 Galicia. El cielo de Baiona se vio cubierto al quemarse el tejado de plástico de la empresa y algunos de los objetos de su interior. En un primer momento se oyeron explosiones que alertaron todavía más a los vecinos y las personas que pasaban por la zona.
Al espectacular incendio, visible para entonces en toda la ría, acudieron miembros del equipo del GES Val Miñor y bomberos de Vigo y O Porriño. También colaboraron en la coordinación la Policía Local de Baiona y Nigrán, y la Guardia Civil. Se desconocen por ahora las causas del suceso, que se están investigando. No se produjeron daños personales, pero sí cuantiosos materiales por determinar.
La principal preocupación era que las llamas se extendieran a las casas colindantes, muy próximas, pero finalmente no hubo que llevar a cabo desalojos. El negocio afectado se ubica en pleno centro de Sabarís, pegado a viviendas y en las proximidades del tanatorio municipal y de la iglesia de las Carmelitas. Los residentes en la urbanización Puente Romano, que está al lado del vivero, colaboraron en un primer momento echando agua con mangueras para tratar de minimizar los efectos del fuego.
A la alarma por la columna de humo se sumó la preocupación de los habitantes del barrio de Baiona con las explosiones procedentes del interior del establecimiento comercial, donde además de plantas también se encontraban animales de distintas especies, como peces, conejos, aves y reptiles. La estructura del vivero quedó completamente destrozada, pero no hubo ningún daño personal.
El corte de la carretera provocó retenciones de tráfico.