Pontevedra, entre las provincias más implicadas en el plan que promueve la Fiscalía
20 sep 2017 . Actualizado a las 18:09 h.El futuro de la investigación de incendios forestales pasa por el diseño de un ordenador sabio que ofrecerá pistas a los investigadores para atrapar a los pirómanos. Parece ciencia ficción, pero es un proyecto que está en marcha desde hace nueve años y en el que está implicada la Fiscalía General del Estado, la Guardia Civil y el Instituto de Ciencias Forenses de la Universidad Autónoma de Madrid.
La provincia de Pontevedra es una de las que más activamente están colaborando en este plan aportando datos sobre incendiarios, según se refleja en la memoria anual de 2016 que acaba de hacer pública la Fiscalía. Es la cuarta provincia española que más participa. Los investigadores contribuyeron a los análisis estadísticos el año pasado con 27 cuestionarios sobre incendios esclarecidos y autores identificados.
El sistema ya tiene un volumen suficiente de información cruzada. La base de datos ha crecido hasta los 2.595 incendios forestales y, según el Ministerio Público, «se dispondría ya de una muestra suficiente para realizar predicciones de casos sin esclarecer, que es el verdadero objetivo del estudio». La finalidad es encontrar relaciones predictivas entre tipos de incendios forestales y características de las personas que los perpetran.
Basta con cumplimentar un sencillo formulario con las características del incendio que está investigando y el sistema ofrece respuestas sobre a qué perfil responden las personas que lo suelen cometer. Así la Guardia Civil obtiene pistas para utilizar durante las pesquisas. El sistema informático orienta a los investigadores sobre a qué perfil responden los sospechosos que tienen que indagar antes de realizar el trabajo de campo. Les marca el camino con los datos que han sido previamente incorporados al sistema.
Una ingeniero becada por la Fundación Guardia Civil se pone en contacto con los investigadores cada vez que se produce una detención o imputación por incendio forestal para que realicen un cuestionario. Los análisis estadísticos realizados han permitido establecer cinco perfiles principales de incendiarios: el que actúa por beneficio propio, el que lo hace por venganza, el que lo hace sin sentido, los que cometen una imprudencia leve y quienes incurren en una imprudencia leve. El único perfil de casos que todavía es pequeño es el que se corresponde con quienes actúan por venganza.
Perfeccionamiento
La Fiscalía tiene previsto perfeccionar este sistema empleando un procedimiento de inteligencia artificial denominado redes bayesianas, que establece relaciones predictivas. Existe ya un prototipo basado en inteligencia artificial que tiene capacidad de auto aprendizaje para ir perfeccionando sus predicciones de manera autónoma según vayan incluyéndose nuevos casos esclarecidos.
Este proyecto comenzó en el año 2007 y está liderado por un equipo científico compuesto por miembros de la sección de análisis del comportamiento delictivo de la Policía Judicial de la Guardia Civil y de la Universidad Autónoma de Madrid. El objetivo es encontrar relaciones predictivas entre tipos de incendios forestal y características de las personas que los perpetran, a fin de ayudar a los agentes de la autoridad con responsabilidades en la investigación a identificar a sus autores, incrementando la tasa de esclarecimiento.
La facilidad para cumplimentar los cuestionarios de forma on line ha permitido consolidar los avances conseguidos en años anteriores. Después de Andalucía, Galicia es la segunda comunidad que más colabora del país.
Drones y cámaras de vigilancia para detectar el fuego y cazar a los pirómanos
Las zonas forestales ofrecen el anonimato necesario para actuar con total impunidad. A pesar de que la Guardia Civil practica detenciones y pone en manos de la justicia a presuntos pirómanos, muchas veces los casos no terminan de esclarecerse por la dificultad para probar los hechos. Además detectar el fuego a tiempo es fundamental para poder actuar con inmediatez y evitar que las llamas provoquen daños devastadores.
Los drones se han convertido en una herramienta muy valiosa en la lucha contra los incendios forestales. Dentro de la Operación Centinela, que han llevado a cabo este verano soldados de la Brilat, se han utilizado aviones no tripulados dirigidos por control remoto. También tienen un efecto disuasorio sobre los pirómanos al poder detectarlos al instante.
Monte cepudo
Los comuneros de Valadares también utilizan cámaras para vigilar sus montes. El dispositivo se encuentra a 527 metros sobre una antena ubicada en lo alto del monte Cepudo. Cubre un radio de diez kilómetros de longitud. En los siete años que lleva en funcionamiento, han logrado detectar ocho incendios.La actual campaña estival ha sido muy tranquila en comparación a la del año pasado, cuando estuvieron en vilo cientos de vecinos de Redondela, Soutomaior, Arbo y As Neves. Salvo unos pequeños incendios que se produjeron en los montes de Couso, en Gondomar, no hubo que lamentar más incidencias. Ha sido un verano tranquilo para los miembros de la Brilat.