Comienza la huelga de los trabajadores de Vitrasa

La Voz VIGO / LA VOZ

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El paro coincide con la Reconquista; Marea y BNG piden al gobierno local que se implique

01 abr 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

La huelga de tres días en Vitrasa comenzó ayer con un seguimiento desigual, después de que las negociaciones fracasasen porque, según los sindicatos, la dirección no les hizo ninguna propuesta concreta sobre un listado de puntos que habían presentado dos semanas antes. El paro coincide con los días grandes de la Reconquista y, por eso, el comité de empresa pidió disculpas por adelantado, «pero exercer o noso dereito de folga é a única maneira de poder reivindicar unhas condicións laborais dignas e un transporte público de calidade».

En paros anteriores, el juzgado ya dio la razón a los sindicatos cuando impugnaron los servicios mínimos. Los trabajadores se manifestaron ayer en la ciudad.

Marea de Vigo no solo apoya la movilización laboral, sino que ayer hizo un comunicado para pedir «o apoio da cidade» a la misma. El grupo de izquierdas considera que la huelga era inevitable ante el «continuo acoso por parte da empresa coa colaboración do Concello» a la plantilla.

La coalición pide que el Concello se implique en la negociación y recuerda que fue un error ampliar la concesión, como hizo el Ayuntamiento durante el primer año de la pandemia. Marea recuerda que el gobierno local tiene la «tutela pública sobre as concesión administrativas que aproba». Rubén Pérez participó en las movilizaciones.

En BNG también pidió que el Concello de Vigo se implique en la negociación. «Ten que meter en cintura dunha vez por todas a Vitrasa, que recibe trece millóns de euros de subvención anual». Según el Bloque, la compañía está incumpliendo el contrato y el gobierno local es cómplice.

Entre esos incumplimientos, el portavoz nacionalista, Xabier Pérez Igrexas, detalla la reducción de 72 viajes diarios en 20 líneas en comparación con las frecuencias que había antes de la pandemia, sin una autorización municipal para hacerlo. También el aumento de los tiempos de viaje y la imposición de horarios flexibles, entre otros.