Míriam Sempere: «Soy una portera un poco loca»

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La alicantina, MVP de la semifinal, considera un «regalo» el subcampeonato del Guardés y destaca que en ningún otro lugar se vive igual el balonmano

03 may 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

A sus 27 años, la alicantina Míriam Sempere se ha convertido en la gran protagonista del éxito del Atlético Guardés en la Copa de la Reina. Su actuación en la semifinal, saliendo desde el banquillo, para eliminar al Bera Bera le valió el MVP y el reconocimiento del mundo del balonmano, deporte que lleva practicando toda su vida. Míriam, que se considera una portera un poco loca, lleva dos años en A Guarda y repetirá en el próximo proyecto con la esperanza de conquistar una copa que, desde su prisma, le deben a la mejor afición. Afirma que en ningún lugar se vive el balonmano igual.

—¿Qué valoración hace de la Copa de la Reina?

—A nivel personal y de equipo, estamos muy contentos. Es verdad que ahora, pensándolo un poco más en frío, ha sido una buena Copa, hemos tenido un buen resultado que nadie se esperaba, pero a la vez, estamos un poco tristes porque teníamos ganas de poder ganar la final y regalarle al pueblo esa copa que tanto espera y tanto se merece.

—El partido del sábado, eliminando al Bera Bera, quedará grabado en su memoria.

—Fue algo que nadie se esperaba. Para nosotros fue un orgullo ganar al anfitrión, al que ahora mismo es primero en la liga y seguramente sea el campeón. Al llegar a la final con poco tiempo de descanso y con una plantilla tan corta, creo que nos pasó factura, pero estoy muy orgullosa de mi equipo, se dio todo hasta el final.

—Entró para parar un penalti y se quedó todo el partido, siendo la MVP de la semifinal.

—Salí con muchas ganas de pararlo. Lo lanzó una compañera mía de años anteriores y pararlo fue un plus. Después, salió todo rodado.

—¿Fue su mejor partido de siempre?

—Si no el mejor, uno de ellos.

—¿Cómo vivió la final?

—El equipo llegó muy motivado, ni nosotras nos pensábamos que podíamos llegar hasta allí y lo hicimos, pero nos pasó factura el físico. Aun así, la cabeza estuvo los 60 minutos en el partido y no pudo ser, pero ya fue un regalo llegar hasta ahí.

—¿Es un premio a tanto trabajo?

—Después de estos años trabajando todos los días, siempre tienes ganas de ver los frutos. La verdad es que ha sido un regalo grande.

—Ha sido su primera gran final después de comenzar en Elche.

—Comencé a jugar en el equipo de mi pueblo y acabé en Elche. Estuve seis temporadas allí jugando en División de Honor y por causas ajenas a mí, tuve que bajar a jugar a Plata. Estuve un año en Elda y dos en Benidorm, con el que disputé una fase de ascenso, y después de la pandemia, recibí la llamada de Prades, me vine a A Guardia a jugar y ya llevó aquí dos años y estoy muy contenta.

—¿Cómo lleva el cambio?

—Soy de un pueblo costero pequeñito de Alicante, de Santa Pola, y tenía muchas ganas de venir aquí porque como se vive en A Guarda el balonmano no se vive en ningún sitio de España. Estoy muy a gusto.

—¿Qué tal con Carratú de compañera de portería?

—Muy bien, se ve desde fuera. Al final, somos una. Somos dos porteras muy diferentes y en todo momento cuando una no está, está la otra. Es una posición más complicada, pero creo que aportamos las dos y que eso hace que el equipo sea mejor.

—¿Usted cómo se define como portera?

—Una portera un poco loca. Pero ya se dice que para ser portera hay que estarlo. Creo que tengo una mentalidad muy joven aunque tenga 27 años. Es como si fuese una juvenil.

—¿Qué tal con la selección española de balonmano playa?

—Estuve concentrada la semana pasada, fue la primera vez que me llamó la selección y fue algo muy chulo. Estoy muy contenta de haber disfrutado de la experiencia. A nivel de portería, es más parecido a la pista.

—¿En la liga van a por Europa?

—Quedan cuatro partidos y tenemos que hacer un final de liga muy bueno y llegar a adquirir la plaza de Europa, que es un objetivo que tenemos.

—¿Continuará en el Guardés la próxima temporada?

—Si todo sigue así, sí. Estoy muy a gusto.

—Parece que toca cambio de ciclo.

—Por circunstancias, tiene que haber un cambio de entrenador, pero creo que la mayoría del grupo continuará y que se puede seguir con el proyecto y seguir luchando por los puestos de arriba, por competición europea y a ver si por fin nos podemos traer la Copa de la Reina. Tenemos que conseguirla porque se la debemos a la gente de A Guarda, porque sin ellos no hubiéramos llegado a donde hemos llegado.