Dos tudenses demuestran cómo convertir en setas de alto valor los residuos del monte

María Jesús Fuente Decimavilla
maría j. fuente TUI / LA VOZ

VIGO

cedida

El proyecto Circular Forest obtiene un premio por innovador

01 nov 2021 . Actualizado a las 13:38 h.

Su original iniciativa ha sido premiada en el Concurso de Proyectos Empresariales Semente Ribeira Sacra. El proyecto Circular Forest, de Miguel Ángel Martínez y José Luis Ríos, consiste en transformar los residuos del bosque, como los restos de podas, hojarasca de castaño y tocones de eucalipto (parte del tronco del árbol que queda al talar) en setas de alto valor comercial. En principio la producción de setas en esa biomasa forestal se centra en el cultivo de la variedad Lepista nuda en follaje de castaños y la de Shitake en tocones de eucalipto. Al concurso se presentaron un total de 45 proyectos de toda España. A la hora de decantarse por el segundo premio para la iniciativa tudense el jurado tuvo en cuenta el carácter innovador de la propuesta, su desarrollo en el medio rural y la puesta en valor de sus recursos.

Los bajos precios de la madera hacen que cada vez más comunidades de montes busquen alternativas para diversificar el aprovechamiento y aumentar los ingresos. De paso, minimizan el riesgo de incendios y crean puestos de trabajo.

«Empecé en la comunidad de montes de Couso, en Gondomar, en el 2020 y a los siete meses salieron la setas. Después, Luis me propuso subir un poco de nivel la experiencia y dar servicios a las comunidades de montes», explica Martínez. En la actualidad hay ocho comunidades de montes de las provincias de Pontevedra y A Coruña interesadas en su proyecto, entre ellas la de Oia, con la que ya trabajan.

La idea es ir aún más allá y seguir experimentando con otras variedades. De hecho, ya están estudiando la posibilidad de cultivar setas con propiedades medicinales. También han probado el aprovechamiento de los tocones de pino para otras variedades.

«Las ubicaciones para cultivar pueden ser muy variadas con tal de que tengan cierta humedad. También el abanico de setas es enorme. Hay un tipo de seta para cada zona. Esto hace que cualquier comunidad de montes que cuente con biomasa tenga la posibilidad de cultivar», indica.

Lo primero que hacen una vez que demandan su servicio es visitar la zona para comprobar la biomasa y el arbolado existente. Incluso a veces acuden antes de que se hagan las podas con el fin de evitar que los tocones se sequen o contaminen. Después estudian las posibilidades, condiciones, exposición y humedad.

A continuación se hace la inoculación en los restos de podas o tocones, que pueden realizarse incluso en verano. En madera de eucalipto las setas Shitake suelen tardar en salir en torno a seis meses, mientras que la Lepista nuda en castaño puede llegar al año. «Una vez conseguida la producción, hay comunidades de montes que quieren seguir ellas mismas y crear puestos de trabajo, mientras que otras nos encargan la comercialización», indica Miguel Ángel Martínez. Un tronco de 20 kilos puede dar 4 kilos de Shitake (un 20%) y el precio en fresco puede estar entre los 15 y 18 euros el kilo.

La idea de estos emprendedores es invertir en maquinaria, lo que les permitirá tener precios competitivos, algo en lo que trabajan en la actualidad.

José Luis Ríos, que es ingeniero informático y máster en geoinformática, se ocupa más de la gestión y de la dirección estratégica, mientras que Miguel Ángel Martínez se encarga de la gestión de proyectos y del desarrollo de productos y servicios. En el 2019 consiguieron el tercer premio del concurso nacional Naturgreen, por reciclar posos de café cultivando setas. Un proyecto de concienciación medioambiental con el que enseñan a los escolares conceptos de economía circular al transformar ese residuo en un alimento saludable.