Menos bodas y fiestas, más rebajas para compensar las pérdidas del comercio

María Jesús Fuente Decimavilla
maría j. fuente VIGO / LA VOZ

VIGO

Oscar Vázquez

Vestidos y pantalones a menos de seis euros son algunas de las gangas en Príncipe

08 ago 2020 . Actualizado a las 01:35 h.

El comercio vigués ya no sabe qué hacer para incentivar las ventas. El descenso en julio ha sido de un 30 % con relación al mismo mes del pasado año. A estas alturas aún arrastra pérdidas ocasionadas por el parón del confinamiento. El respiro que otros veranos suponían las ceremonias y todo tipo de festejos ha desaparecido del mapa al suspenderse para evitar nuevos contagios de coronavirus. Para paliar las pérdidas, las rebajas que se ofrecen son mucho más suculentas que en temporadas anteriores. «Me he comprado tres camisetas en Sfera por menos de doce euros las tres y un vestido por siete. Nunca estuvo tan barato», comenta Eugenia al salir de la tienda de Urzaiz. Su amiga, Azucena, se ha hecho con unas sandalias por nueve euros en Mango y antes ha pasado por Zara y se ha llevado una blusa por siete euros.

Los precios anteriores no son una excepción, en Stradivarius se anuncian vestidos y pantalones por menos de seis euros y en Springfield los pantalones de caballero no llegan a nueve. Solo son algunos ejemplos del centro de Vigo, pero la oferta es similar en todas la zonas de la ciudad.

«Hemos estado dos meses parados, nos han cortado el grifo de las bodas y en verano vivimos de las fiestas. La gente no se viste, con unas bermudas y una camiseta, arregla. Yo mismo, solo vendo polos, camisetas y algún pantalón. Si tienes parcas, americanas y trajes, tienes que sacarlos de en medio», comenta el presidente de los comerciantes de As Travesas, Víctor Fernández. Admite que en esa zona aún van resistiendo, porque hay barrios de Vigo, como O Calvario y Teis, que lo están pasando peor.

La situación llega a tal punto que a veces los pequeños comerciantes se echan una mano entre ellos y se intercambian mercancía para darle salida. Todas las miradas están puestas en el otoño y en lo que puede pasar. «Tememos que a partir de septiembre pueda haber bastantes concursos de acreedores», dice Misa. Y eso que, según añade, con la pandemia la gente ha vuelto mucho al pequeño comercio para huir de los tumultos.

Entre los sectores más afectados por la caída de las ventas figuran el textil, calzado y perfumerías. El uso de mascarilla ha provocado un drástico descenso de productos de belleza, como todo tipo de cremas faciales, incluidos maquillajes. La caída ha sido de un 60 %,según reconoce el representante de los comerciantes. Solo se han visto compensados aquellos establecimientos que también venden productos de limpieza.