Vida Digna repartió ayer ayuda para 400 familias y la fila de ciudadanos llegó de la calle Brasil a Pizarro
26 may 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Las colas para recibir alimentos ante la sede de Vida Digna van en aumento. Cada vez son más las personas que se han quedado sin recursos y acuden a esta asociación para poder subsistir.
La ONG dedica los lunes al reparto general y ayer la fila de ciudadanos alcanzó un triste nuevo récord de longitud, desde el número 54 de la calle Brasil, donde está la sede, hasta la calle Pizarro, a la altura del Mercadona, 300 metros en total. Los voluntarios repartieron bolsas de alimentos para un total de 400 familias. «No nos gustan estas colas, pero es la única forma que tenemos de echarle una mano a la gente», afirmaba ayer Ricardo Misa, responsable de la organización. Vida Digna ha experimentado un incremento de un 40 % en el número de familias a las que ayuda debido a la crisis sanitaria. Es un tiempo en el que se está volcando con la alimentación de los ciudadanos sin recursos.
Además del reparto de los lunes, los jueves entregan alimentos a personas sin hogar, realizan repartos diarios y mantienen abierto el comedor social de los fines de semana para unas 80 personas que acuden a la sede a recoger los menús. El Concello se ha comprometido a adelantar ayudas para que puedan seguir ejerciendo su labor. La Xunta también aporta alimentos y, recientemente, La Caixa les ha donado una cámara frigorífica que era muy necesaria.
No obstante, Ricardo Misa, afirma que siguen necesitando mucho apoyo porque las necesidades son muchas y saben que van a aumentar todavía más. Dentro de una semana confían en volver a abrir sus oficinas para poder prestar una atención presencial.