El oro «improvisado» de Gustavo

M. V. F. VIGO / LA VOZ

VIGO

CEDIDA

El tudense Rodríguez estuvo a punto de quedarse sin dorsal en el Nacional de Duatlón y lo acabó ganando

05 mar 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Estuvo a punto de no tomar la salida y acabó siendo campeón. El veterano deportista tudense Gustavo Rodríguez tiene un amplio palmarés a sus espaldas, pero ninguno de sus éxitos es comparable, por las circunstancias que la rodearon, a la victoria del domingo en el Campeonato de España de duatlón disputado en Soria y para el que hasta unas horas antes de la hora marcada para la salida de la prueba, el triatleta no tenía dorsal. Viajó esperando que hubiera alguna baja que le permitiera estar y tuvo al suerte de que ocurrió de esa manera. Así llegó una victoria «improvisada».

Gustavo tenía fijada esta competición desde hace tiempo como el primer test de la temporada. Fue la semana anterior cuando supo que no aparecía en la lista provisional de inscritos y empezó a tomar conciencia de que su participación estaba en riesgo. «Fue una mezcla de varios problemas. Sabíamos que había unos criterios, pero pensábamos que en la división en que está el club teníamos derecho», señala el tudense, que no pudo ganarse la plaza el año pasado por lesión a la cita en la que ya había ganado en el 2016 y el 2017.

Como consecuencia de no poder entrar finalmente ni por la vía individual ni por la del equipo, Gustavo quedó relegado a las plazas que sobraran por orden de inscripción. E inicialmente no tuvo sitio. «Hicimos y deshicimos la maleta varias veces antes de salir de viaje. Al final decidimos ir porque estadísticamente había posibilidades. Se habían dado de baja tres personas y estábamos a una, así que había esperanza», recuerda. Necesitaban que faltara un élite y, cerrado el control de firmas pasadas las 19.00 horas de la tarde del sábado, se confirmó que era así. «La cosa estuvo pero que muy ajustada», reconoce.

El triatleta explica que entre los criterios hay varios que «no tienen sentido en una carrera como esta», en la medida en que no hay ránkings de duatlón ni campeonatos autonómicos. «A veces es difícil establecer unos criterios que se ajusten, sobre todo en modalidades secundarias que no son el triatlón. Pero quizás se deberían reservar unas plazas para deportistas internacionales. Esperemos que se mejore poco a poco», dice.

Rodríguez aclara que su denuncia del caso a través de las redes sociales fue siempre con ánimo de «crítica constructiva» y lamenta que haya habido quien las entendió de otro modo. «Nunca pensé que se tratara de nada personal contra mí, pero hubo gente que sí interpretó eso de mis palabras», indica el deportista, que agradece la buena organización de la prueba y la ayuda de la Federación para conseguir alojamiento y apoyándole en todo lo posible.

Ya en lo estrictamente deportivo, que en absoluto se vio afectado por todo lo sucedido, Gustavo «sabía que estaba en un buen momento, pero en la primera carrera del año es complicado saber a ciencia cierta cómo llegas hasta que te pones el dorsal y sales a competir». Pero las dudas se disiparon por completo. «Es una distancia en la que nadie tiene mucha experiencia, hay más incertidumbre con los ritmos», añade. Con todo, se sintió bien. «Me encontré bien en carrera, de la bici salí con una renta en principio suficiente pero en los últimos 5.000 metros me obligaron a apretar y tocó sufrir», relata.

Satisfecho con el resultado, ahora se prepara para afrontar los dos grandes retos del año: la clasificación para Kona y para los Juegos Paralímpicos como guía de Héctor Catalá. «Creo que no podía tener unos objetivos que me motivaran más. Es un año de mucha ilusión». Y ha comenzado de manera inmejorable.