La cámara 3-D de Street View llega a perdidas corredoiras pero tiene vedado el paso al puerto, Peinador, la ETEA, al mercado de O Calvario o la plaza de la Independencia
26 jul 2014 . Actualizado a las 22:42 h.Muchos usuarios usan la aplicación Google Maps o Street View, fácil de encontrar en Internet, para recorrer, como si estuviesen allí mismo, las calles de Vigo y localizar direcciones o negocios. Previamente, un coche de Google que incorpora en el techo una cámara tridimensional ha captado la imagen de las rúas a la vez que transita por ellas. La Fiscalía usa un programa similar de Google, que permite ver la evolución histórica de un lugar, para probar infracciones urbanísticas mediante capturas vía satélite. Sin embargo, Vigo tiene lugares vedados a los que no puede acceder el vehículo dotado de una cámara 3-D en el techo.
En su mayoría son zonas restringidas al público y protegidas con caseta del guarda de seguridad y valla levadiza. Aquí se incluyen las entradas del Puerto en O Berbés, Areal o el muelle de Trasatlánticos, el aeropuerto de Peinador, la zona Franca de Bouzas y la ETEA, una antigua instalación militar que ahora es un espacio público. Otros, como el paseo de A Guía que sale del puerto deportivo de A Lagoa quedan excluidos inexplicablemente. La última toma es del 2008.
En otras ocasiones, las capturas no son posibles porque lo impide la peatonalización de las calles y las señales de prohibido el paso. Es el caso del mercado de O Calvario, cuya imagen no se ve en Street View. Tampoco se puede ver la estatua de la plaza de la Independencia, al ser una zona inaccesible en coche.
El ojo indiscreto de Google lo escanea todo, incluso las autopistas y túneles subterráneos, pero tiene un límite: las laberínticas pistas asfaltadas de las parroquias rurales, a las que solo se puede llegar por una intrincada red de corredoiras. Muchas quedan fuera del alcance del mapeado en 3-D y eso que el coche del mayor buscador de Internet avanza sistemáticamente mientras lo permite el ancho de calzada. Pero, al final, le pasa lo mismo que a cualquier conductor vigués: termina en un callejón sin salida, de bruces contra el portal de un chalé, que le obliga a dar marcha atrás. Un ejemplo es el Camiño de Ameixeira, en Alcabre, donde la ruta de Google se interrumpe ante el portalón de una finca. Lo mismo pasa en la cercana calle Castaña. Y el Camiño Caringosta, en Coia, es un ejemplo de lugar donde el vehículo del 3-D se para y desiste de seguir hacia ninguna parte.