
El banco de Tomiño volvió a recibir ayudas ayer durante la caravana solidaria organizada para la niña de Redondela con una grave enfermedad
04 feb 2013 . Actualizado a las 11:26 h.Reciclar es también una forma de ser solidario porque con la reintegración en el mercado de productos de deshecho se pueden obtener ingresos con los que apoyar causas de emergencia. El banco de Tomiño volvió ayer a palpar esta voluntad de ayudar de miles de personas anónimas con el simple gesto de ir coleccionando tapones de plástico de todo tipo de envases.
La caravana solidaria organizada para recoger la nueva remesa de tapones que servirá a ayudar a Jessica Martínez Romero, una chica de Redondela con una rara enfermedad, superó todas las expectativas. El objetivo era recoger en cuatro puntos de Vigo y Redondela cuatro toneladas de tapones para posteriormente llevarlos a las instalaciones del banco en Tomiño. Pero gracias a esta iniciativa lograron recaudarse más de cinco.
La colaboración de Vespamiñor, con el apoyo de frutas Sol, fue muy importante para lograr este objetivo. Una caravana de cuarenta moteros escoltó a los dos camiones y una furgoneta que se emplearon para cargar toda la mercancía en los puntos de recogida ubicados en las calles Merlo y Brasil de Vigo, en la casa de Jessie de Redondela y en el establecimiento Lar de Maximina, en O Porriño.
Los moteros colaboraron para poder cargar todo el material, así como su descarga en Tomiño. Gracias a esta nueva aportación, el banco de tapones de Tomiño ya tiene una reserva de nueve toneladas de plástico en su almacén de O Baixo Miño y otras dos toneladas en Lugo. Ahora solo les quedan mil kilos para completar una partida de doce toneladas, con los que conseguirán 3.500 euros que se destinarán al estudio de la enfermedad de Jessie.
Dentro de 15 días volverán a reunir a voluntarios de toda Galicia para clasificar todos estos materiales antes de su envío a la planta de la empresa de O Porriño que las compra. El banco de tapones comenzó su andadura en septiembre del año paasado con el único fin de ayudar al máximo número posible de niños enfermos.
Iniciativa ciudadana
Nació a partir de una iniciativa ciudadana que consiste en la recogida, clasificación, empaquetado y envío de dichos tapones a la empresa que los compra. La iniciativa nació a raíz de la marea solidaria que se formó para ayudar a Diogo Farinhoto, el niño de Caminha que precisba una mano ortopédica, y al que siguió Paula, la niña de Boiro con agenesia sacra. El Ayuntamiento de Tomiño colabora con esta causa aportando un local que se utiliza como almacén, y que está situado en la parroquia de Goián, encima de la plaza de abastos. Todo el mundo puede pertenecer a este banco de tapones y colaborar en las distintas formas que hay de hacerlo, juntando tapones, seleccionando o ayudando a cargar camiones entre otras alternativas útiles.