Le faltan por cumplir 8 años de prisión y la Audiencia ordena su captura
18 oct 2012 . Actualizado a las 07:15 h.Jorge Pérez Alonso, condenado a 14 años de cárcel por matar a navajazos a un vigués que celebraba el bautizo de su hija el 3 de abril del 2006, no ha regresado a la cárcel después de disfrutar de un permiso. Aún le quedaban ocho años por cumplir pues su pena acaba en el 2020. La Quinta Sección de la Audiencia de Pontevedra, con sede en Vigo, ordenó hace una semana la búsqueda y captura del homicida fugado y la policía ha iniciado el rastreo.
El recluso, vigués de 35 años, tenía orden de reingresar en el centro penitenciario de A Lama tras disfrutar de un permiso ordinario. Tras detectar su ausencia, la Audiencia ordenó su búsqueda y captura el pasado día 9. Está considerado como un reo habitual que tiene su domicilio en la parroquia de Coruxo. Fuentes jurídicas confirmaron ayer que siguen sin tener constancia de que el prófugo se haya entregado voluntariamente ni haya sido detenido.
Pérez Alonso llevaba seis años en prisión desde que en la Semana Santa del 2006 apuñaló en una riña al joven Javier Amorín a la salida del pub Dickens. La víctima había salido de copas con su hermano para celebrar el bautizo de su primera hija. En el interior del local, a las cuatro de la madrugada, Amorín acusó a Jorge y unos colegas de robarle una chaqueta y les lanzó un vaso con alcohol. La pandilla, enfadada, persiguió a los hermanos por la calle García Barbón y Jorge sacó una navaja y le asestó a Javier varias seis puñaladas, algunas por la espalda cuando forcejeaba con él. Las heridas, una en el corazón, le causaron un shock y la víctima se desplomó tras caminar 80 metros con el arma clavada en la espalda, según relató un testigo en el juicio. El día de la vista, en abril del 2007, la asociación que defiende a las familias y víctimas de crímenes violentos (Avidev) recibió al acusado con pancartas que pedían «penas íntegras». Un jurado popular lo declaró culpable del crimen y la Audiencia en Vigo lo condenó a 14 años de cárcel tras negarle una reducción por actuar ebrio o bajo un arrebato. El Tribunal Supremo ratificó la condena en septiembre del 2008. Unos meses antes, prorrogó su prisión provisional para evitar que saliese a la calle mientras la sentencia no era firme.
Otras fugas
Los permisos penitenciarios han sido aprovechados por otros delincuentes para escapar, como el caso de una banda francesa que traficaba con drogas en Nigrán. Además, Jorge Luis Sosa, Makelele, condenado a cuatro años de cárcel por el accidente de Jenaro de la Fuente, es buscado por la Interpol.
Jorge Pérez apuñaló en el 2006 a un joven que festejaba el bautizo de su hija