La marcha a Sestao de los dos supplies de Sevilla representa un nuevo mazazo para el naval vigués. El primer afectado, claro, es Vulcano, pero no el único ni el principal. De hecho, el golpe más fuerte, al menos cuantitativamente, se lo lleva la industria auxiliar. Asfixiada como está desde hace más de un año, daba prácticamente por seguro este balón de oxígeno que, tal y como están las cosas, «salvo que se produzca un milagro», se da por perdido.
¿Qué carga de trabajo supondrían los dos barcos de Sevilla?
Representarían trabajo para 900 personas al menos durante medio año, y para 500 otro año más. Uno de los buques ya está a flote, pendiente del armamento, es decir del equipamiento interior, tarea que lleva alrededor de seis meses. El segundo apenas está empezado, así es que garantizaría tajo para un año. Dado que podría trabajarse en los dos al mismo tiempo, se podrían firman 800 contratos con la industria auxiliar, repartidos a razón de 400 por buque, a los que habría que añadir la plantilla de Vulcano, integrada en estos momentos por 110 trabajadores.
¿Qué ha podido decantar la balanza a favor de La Naval?
Nadie se acierta a explicar los motivos, máxime después de que el armador reconociera a la dirección del astillero que habían presentado una oferta muy bien elaborada. «El precio que presentamos es aquilatado, el proyecto es inmejorable y con la financiación no hay problema, así es que si no nos adjudicamos el contrato será por cuestiones que no están bajo nuestro control», señaló una fuente vinculada a la dirección. Un poco más explícito fue un portavoz del comité de personal: «Igual existe algún compromiso con Sestao, tal vez el País Vasco genere más confianza de Galicia, y tal vez nos pidieron tanta información para luego apretar a La Naval».
¿Qué opciones tiene ahora Vulcano?
Fuentes de la empresa reconocen que la decisión sobre los barcos de Sevilla supone una contrariedad, pero que «el mundo no se termina aquí». Añade que hay un par de proyectos o tres en los que están muy bien posicionados, pero que la ausencia de tax lease los mantiene paralizados. «Mantenemos muchos frentes abiertos, igual que nuestros competidores, pero sin una herramienta fiscal que nos permita competir en igualdad de condiciones hay poco que hacer. Si acaso, algún barco pequeño o alguna oportunidad como la de Servilla». Fuentes cercanas a la dirección de Vulcano aseguran que su departamento comercial prepara una oferta para competir por el flotel y los quimiqueros de Pemex.
En el mejor de los casos ¿cuándo podría Vulcano recuperar la actividad?
Sevilla era su esperanza de hacerlo a partir de septiembre. Ahora, en el mejor de los casos y aunque el tax lease se probara mañana el plazo se dilata. Será muy difícil que pueda hacerlo antes del 2013. Mientras tanto, salvo los trabajadores de la oficina técnica, el resto de la plantilla está en ERE rotatorio.