Vigo, capital Petelos

j.f. vigo / lA voz Eduardo Rolland

VIGO

03 jun 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Vale que Vigo no sea capital de nada. Pero asusta lo que se avecina con el área metropolitana. El presidente de la Diputación, Rafael Louzán, sostiene que la presidencia del futuro órgano administrativo recaiga en un alcalde del Partido Popular, atendiendo al hecho de que, salvo en Fornelos de Montes, donde se impuso el PSOE, su formación fue la más votada en las últimas elecciones. Las cuentas de Louzán son claras: el PP logró 119 concejales, por 52 socialistas y 44 del BNG. Con estas cifras, tendría mayoría absoluta en la futura asamblea del área, con 26 de sus 47 miembros. Y, en tal tesitura, su intención es pedir a sus ediles que veten que Vigo presida el área metropolitana, otorgando la presidencia a un alcalde propio, como podría ser el de Pazos de Borbén, hermosa localidad de poco más de tres mil habitantes.

Así que nos encaminamos hacia Vigo, capital Petelos. Lo que no supone ningún demérito, pero resulta chocante. Imaginamos que el alcalde pedáneo de Pontellas, por ejemplo, haría una gran labor como presidente del área metropolitana. Y seguro que daría una foto estupenda al ser recibido en la Moncloa o al entrevistarse, de igual a igual, con el alcalde de Barcelona, Xavier Trías. Aunque insisto en que -será cosa mía-me chirría mucho esta situación. Lo lógico sería que la presidencia del Área Metropolitana de Vigo recayese, por ley, en la alcaldía de la ciudad que da nombre al organismo. O que se eligiese por un criterio de representatividad, de forma que sea presidente quien reúna el voto de concellos con dos tercios de la población. Con lo que a Vigo le bastaría sumar el apoyo de uno o dos municipios. Esta última fórmula convertiría la votación en un paripé. Así que lo mejor, para ser justos, sería que la ley que ahora llega al Parlamento de Galicia, garantice que Vigo presida siempre su área metropolitana. Hablamos de una cuestión de mero sentido común, sin lugar a disputas entre concellos. De hecho, no se ha conocido nunca una queja hacia Vigo formulada por los municipios de su entorno, en un área metropolitana que, en muchos aspectos, ya existe de facto. Las líneas de Vitrasa llegan a Redondela y a Mos con toda naturalidad. Vigo sirve agua a municipios como Moaña, Cangas y Nigrán. En el aeropuerto de Peinador, operan con normalidad los taxis de Mos y Redondela. Y, cuando se ha querido invertir en parques industriales, se ha hecho en los municipios limítrofes, como es lógico. Aquí no hay disputas localistas, sino un histórico buen entendimiento. Por eso resulta tan peligroso que Louzán proponga ahora politizar el futuro ente metropolitano. Es inaceptable que se pretenda emponzoñar un proyecto nacido para la gestión y la eficiencia. Estamos perdidos si se quiere utilizar el área para la confrontación entre partidos.

eduardorolland@hotmail.com