La dueña del Sol

VIGO

03 dic 2010 . Actualizado a las 10:54 h.

Hay que hablar con la viguesa que dice ser dueña del Sol para que le suba un poco el termostato. Porque, desde que Ángeles Durán posó para La Voz con su declaración de propiedad, hace un frío polar. Y la culpa, obviamente, es de ella. Pues se equivoca esta señora si solo quiere ser dueña del Sol para lo bueno. A partir de ahora, las quejas, a la propietaria.

Pretende Durán, según sus declaraciones, comenzar a cobrar por la utilización que hacemos del Astro Rey. Y ha escrito a La Moncloa para que el Gobierno le pague un canon por los paneles solares, por ejemplo. Del dinero recaudado, se quedará un diez por ciento. El resto, dice, lo destinará a obras sociales.

Lo que olvida nuestra avispada y simpática convecina es que también vamos todos a reclamarle por los perjuicios. Si hace frío, interpondremos una demanda. Exigiremos indemnización si una helada arruina las cosechas. Y que no se le ocurra al Sol quemarnos en la playa, porque nos va a oír doña Ángeles Durán?

Donde ella cree que ha encontrado un gran negocio, tal vez comience su ruina. El Sol es como esos pazos decrépitos que le tocan en herencia a algunas desgraciadas familias. Muy grande, muy bonito, pero entre impuestos y mantenimiento, la propiedad se convierte en una maldición.

No va a ganar para abogados la flamante propietaria cuando una tormenta solar desbarate un satélite, cuando el astro rey deshiele el Ártico o cuando deslumbre al portero en un decisivo lanzamiento de penalti.

Es de temer que el negocio del Sol lo van a hacer los abogados. Y, tal vez por ello, ha aparecido uno rumano, llamado Virgiliu Pop, que asegura que él es el verdadero dueño del Sol, tras declararse su propietario en el 2001 en el registro de la propiedad extraterrestre del Instituto Arquímedes.

Con buen criterio, el señor Pop, de tan sonoro apellido, critica que Ángeles Durán solo ha acudido a un notario a que dé fe de que ella se considera dueña de nuestra estrella. Lo que no quiere decir que lo sea. «Es como si yo digo al notario que soy pareja de Angelina Jolie», explicó nuestro hombre.

No sabemos cómo terminará el conflicto de propiedades entre el rumano y la viguesa. Pero el caso nos recuerda a un dirigente vecinal que, en los años 90, proclamó haber descubierto una tierra desconocida, una especie de nuevo continente, situado en Bouzas. Se trataba del relleno, que se construyó sin las preceptivas licencias, bastante a la brava, y no tenía por tanto dueño conocido.

Fracasó su tentativa de declararse dueño de la finca, aparecida de la nada, ante el registro de la propiedad. Y pronto Zona Franca se hizo con los terrenos.

Pero aquella anécdota, con ser audaz, no le llega al betún a este asunto de adueñarse de Lorenzo . Mientras Virgiliu Pop y Ángeles Durán dirimen sus diferencias, solo nos resta insistir en lo dicho: que se queden el Sol si lo quieren, pero que no sean cutres y suban un poco el termostato, que nos estamos helando.