Bien es cierto que es la Xunta de Galicia la que tiene las competencias y la facultad de designar a sus cuatro vocales, pero a nadie se escapa que la presidenta portuaria podría pretender un consejo de administración a su medida y, por tanto, con un voto leal en todo momento, sin posibilidad de amagos de transfuguismo y que puedan en casos extremos frenar sus objetivos.
De este modo, es posible que cuente, entre esas cuatro sillas de que dispone, con cargos de su confianza a nivel político y no deje todo en manos de las organizaciones empresariales, que ya suman, per se, tres votos (Cámara de Comercio, Confederación de Empresarios y Cooperativa de Armadores), dándoles más opciones de tumbar una propuesta en casos de una votación que aborde un tema controvertido.
Con todo, hay que tener en cuenta que la presidenta actual abandonará su cargo en los próximos meses, para presentarse a la Alcaldía de Vigo en las elecciones de mayo del 2011.
Repiten
Entre las posibles opciones firmes por parte de la Xunta, según las fuentes consultadas por La Voz, serían las de Pierre Ianni, director de la planta de Peugeot Citroën en Vigo; el presidente de Caixanova, Julio Fernández Gayoso; y el vocal de Pescanova, César Real. La duda de la cuarta plaza de la Xunta recaería sobre Gonzalo López, actual consejero, director general de Frigalsa y hasta hace poco presidente de la Federación de Usuarios del Puerto de Vigo.